Tumbando Caña
Primer Encuentro de Soneros
Celebrando el 20 aniversario de La Nueva Nostalgia
Ampliar la imagen En el encuentro se honrará al sonero cubano Francisco Fellove, en la imagen Foto: Roberto García Rivas
CON UN ENCUENTRO de agrupaciones soneras y la participación estelar de Magos Herrera y Salvador Negro Ojeda, La Nueva Nostalgia, la más correcta agrupación de son cubano en México, celebra hoy, en el salón La Maraka, 20 años de labor musical.
ESTE FESTEJO, EN el que se rendirá homenaje a Toño Jiménez y Francisco Fellove, dos grandes soneros de México y Cuba, respectivamente, tiene como finalidad, aparte de exaltar el onomástico de la agrupación, incentivar y preservar el gusto y la creación del género como paradigma de gozo. Por eso, en el programa se incluye un recital poético en voz del vate Félix Martínez Alaves González, una demostración de baile sonero y rueda de casino a cargo de los Amigos del Solar y un concierto de tres (pequeña guitarra de tres cuerdas dobles imprescindible en el son), en el que participan Willi Trejo, Leonardo Hernández Delgadillo, Héctor Sánz Camejo y Felipe Acevedo, cuatro destacados instrumentistas de México, Cuba y Venezuela.
LA HISTORIA DE la agrupación festejada comienza en las aulas del Colegio de Ciencias y Humanidades, plantel Azcapotzalco, cuando Julio Toledo (bajo), Willi Trejo (requinto), Luis Alberto Avila (guitarra) y Francisco de Santiago (cantante) constituyen el Cuarteto Nostalgia, en el que interpretan boleros y trova cubana. De esos tiempos se recuerdan experiencias de serenatas, festivales interescolares, participaciones en radio y televisión y una serie de escaramuzas en lugares bohemios.
MAS ADELANTE, SEGUN narran en entrevista, deciden extenderse en el amplio espectro musical caribeño, y para tal fin cambian el requinto por el tres e incluyen congas y bongó. Esa ampliación instrumental les permite abordar el son cubano y canciones rítmicamente más movidas.
QUIENES LES CONOCEN en aquel momento tan jóvenes y haciendo esa música "con olor a viejo" conceptualizan su quehacer como "una renovación" de lo tradicional, surgiendo de ahí el nombre definitivo de la agrupación: La Nueva Nostalgia.
CON ESE NOMBRE empiezan a darse a conocer en el ámbito sonero. Se escuchan bien, pero sienten que aún no llegan al color definitivo. Para tal fin experimentan con variados instrumentistas, como el pianista Mario Patrón, quien les encauza por el camino del jazz; Oscar Terrazas, saxofonista, quien le da una coloratura diferente a la sonoridad grupal; los flautistas cubanos Reynaldo Pérez y Rafael Carrasco, quienes aportaron su visión del son; Martín Arano, percusionista veracruzano que incluye el cajón peruano de manera alternadas con las congas, y el cantante y guitarrista César de Santiago, quien pronto tiene que emigrar. Todo se da, todo se experimenta, pero es con la llegada del extraordinario trompetista cubano Martín Escollies Hernández que el grupo toma camino hacia su definición.
"ESCOLLIES AFIANZA EL conocimiento que teníamos del son expone JulioToledo. Fue determinante en el sonido del grupo. Músico de gran experiencia y trayectoria, compartió su conocimiento y le dio seguridad a las interpretaciones. Sus arreglos e ideas musicales, en cuanto a sentido armónico se refieren, provocaron un mecanismo de engranaje que procuró fluidez a nuestras ejecuciones, tanto en la proyección de los temas como en los desarrollos personales."
CON UN REPERTORIO basado en los clásicos del género (Sazonando, Un son para ti, Don lengua, Menéame la cuna, Quimbombó, entre otros) y con gran carisma, La Nueva Nostalgia inyecta una bocanada de aire fresco a la alicaída escena musical bailable de la ciudad capital, brindando momentos que transcurren del bolero a las tempestades de sones con montunos y descargas fantásticas.
EL AFINQUE QUE tienen en su musicalidad se da gracias al virtuosismo interpretativo de los integrantes actuales. Empezando por Willi Trejo, genial trecero que rebasa estilos y sellos hasta imponer el propio con un fluido de acordes no explotados en el son (mismo que da la agudeza musical) y un sentido de la improvisación que apabulla. Julio Toledo, quien con su contrabajo es el mástil de la embarcación, donde se prende el velamen y viaja segura la nave de lo musical; siempre serio, no baila, pero cumple con su función: hacer bailar. La imponente sonoridad del trompetista Martín Escollies con sus solos y floreos, que nos recuerda a Varona, Chapotín, Guajiro Mirabal.
LA MARAVILLA ESCENICA y musical la proporciona una apisonadora base rítmica formada por los hermanos Oscar y César Pacheco Templos, tumbadora y bongó con campana; y un estelar dúo de cantantes: el intenso bolerista Francisco de Santiago y esa combinación de rumbero y sonero que es el cubano Luis Agüero.
ESA ES LA Nueva Nostalgia, una agrupación que, como dijera Froylán López Narvaez, es pilar de la resistencia sonera en México
¡SALUD POR ELLOS! Y recuerde, la cita es hoy en el Salón La Maraka (Eugenia y Mitla), a partir de las 21 horas.