Ataques dejan al menos 10 decesos en el país invadido; asesinadas, otras 24 personas
Preparan Robert Gates y George W. Bush nueva estrategia para Irak
Londres y Washington ponen en peligro a cristianos en Medio Oriente: Iglesia anglicana
Ampliar la imagen
Jaclyn Sharratt muestra una foto de su hermano Justin Sharratt, militar estadunidense acusado de asesinar a civiles iraquíes en Haditha, en noviembre del año pasado
Foto: Ap
Washington, 23 de diciembre. El nuevo secretario de Defensa estadunidense, Robert Gates, entregó este sábado al presidente George W. Bush las primeras conclusiones de su visita a Irak para ayudarlo a elaborar una nueva estrategia en ese país, donde la violencia dejó al menos 10 muertos en diversos ataques.
Cinco días después de que asumiera como jefe del Pentágono, Gates se reunió con Bush en Campo David, cerca de Washington, donde el presidente pasará las fiestas de Navidad, indicó la Casa Blanca.
Al encuentro también asistieron la secretaria de Estado, Condoleezza Rice, y el consejero de Seguridad Nacional, Stephen Hadley. Presionado por la violencia sectaria en Irak y por los ciudadanos de su propio país, que piden cambios, Bush estudia alternativas con el fin de anunciar en enero una nueva estrategia para la guerra en Irak.
Un vocero de la Casa Blanca, Blain Rethmeier, indicó al término del encuentro entre Bush y Gates: "el presidente dejó abiertas todas las opciones sobre la mesa".
En la nación ocupada, al menos 10 personas murieron desde la noche del viernes en incidentes violentos, seis de ellas en Samawa, al sureste de Bagdad, durante enfrentamientos entre policías iraquíes y miembros de una milicia chiíta.
Por otro lado, abogados de los ocho soldados estadunidenses que fueron sentenciados por la masacre en la localidad iraquí de Haditha hace 13 meses, advirtieron que pondrán su dedo acusador mucho más allá de la cadena de comando si esto significa evitar que sus clientes sean utilizados como chivos expiatorios.
"Vamos a buscar en cada coronel de doble estrella que ordenó esto (la masacre)", indicó Kevin McDermott, abogado de California, quien representa al capitán Lucas McConnel, el cual estuvo al frente de los asesinatos.
Los abogados defensores señalaron que sus clientes siguieron la política oficial del ejército.
En tanto, al menos 24 iraquíes, entre ellos seis niños, varias mujeres y un anciano en silla de ruedas, fueron asesinados en Haditha, en respuesta a la muerte de uno de sus compañeros a causa de un atentado con bomba en una carretera en noviembre de 2005.
Sólo cinco de los muertos fueron identificados como extremistas, mientras el resto eran civiles inocentes.
Por otro lado, el jefe de la Iglesia anglicana, Rowan Williams, advirtió que la política "improvisada" e "ignorante" que los gobiernos de Gran Bretaña y Estados Unidos llevan a cabo en Irak amenaza a los cristianos en Medio Oriente, en artículo que publicó este sábado el diario británico The Times.