Temor por endurecimiento de las políticas migratorias; creció 10% el envío de dinero

Cae más de 30% el número de paisanos que vuelven a Guanajuato en diciembre

Siete de cada diez guanajuatenses en edad laboral buscan empleo en Estados Unidos

Planea el gobierno ''sangrar'' las remesas de los trabajadores para pagar obras: diputado

MARTIN DIEGO RODRIGUEZ CORRESPONSAL

Guanajuato, Gto., 25 de diciembre. Unos 30 mil migrantes guanajuatenses regresaron este mes a sus ciudades de origen para pasar las fiestas de diciembre. Son 10 mil personas menos que el año pasado, informó el titular de la Secretaría de Desarrollo Humano y Social (SDSH) del gobierno estatal, Juan Carlos López Rodríguez. Atribuyó este fenómeno a las políticas migratorias del gobierno de Estados Unidos y comentó que, no obstante, las remesas provenientes del vecino país sumaron casi 2 mil millones de dólares, cantidad 10 por ciento mayor a la de 2005.

Esos envíos superan al ingreso que obtienen algunos municipios como Romita, cuyo presupuesto para 2007 es de unos 90 millones de pesos, mientras que las remesas de migrantes a esa localidad ascendieron a 100 millones de pesos, según datos de la alcaldía.

Encuestas realizadas entre migrantes por la SDSH indican que 3 por ciento del dinero que mandan los migrantes se usa para crear un negocio familiar, la mayoría tiendas de abarrotes en las comunidades; entre 12 y 13 por ciento se invierte en mejoras a las viviendas, 40 por ciento se va a gasto corriente de las familias y el resto al pago de deudas, gastos de salud y compras diversas, explicó dijo López Rodríguez en entrevista.

Ante este flujo de recursos, el gobierno de Guanajuato planea ''repatriar'' los fondos de los migrantes mediante una inversión tripartita, en la cual participen los gobiernos federal y estatal, que aportarían cada uno un peso por cada peso que inviertan los migrantes en obra de infraestructura social y en proyectos productivos.

La SDSH calcula que una de cada cinco familias de Guanajuato recibe remesas de los migrantes y que 70 por ciento de la fuerza laboral de la entidad que oscila entre 15 y 40 años de edad trabaja de manera indocumentada en Estados Unidos.

Según el más reciente Censo de Población y Vivienda del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), uno de cada cuatro guanajuatenses emigra a Estados Unidos. Este dato ha sido confirmado por la Secretaría de Desarrollo Humano y Social, cuya scifras señalan que hay un millón 250 mil guanajuatenses en aquel país. ''Se observa que de cada 10 guanajuatenses que emigran, seis son hombres y cuatro mujeres, y se estima que al año hay un total de 80 mil cruces por la frontera, ya sea de manera ilegal o legal. De ellos, 50 mil migrantes se quedan en aquel país año con año''.

Por tal motivo, dice el gobernador Juan Manuel Oliva Ramírez, se busca que los 2 mil millones de dólares de remesas que se envían a Guanajuato ''se transformen en capital de ahorro y en patrimonio y, por otro lado, convertir el capital social que representa tener un mexicano de cada tres en Estados Unidos, en una red social, en negocios para el desarrollo local. Esto significa que estamos preparando una nueva generación de instrumentos que nos permitan mezclar los negocios de particulares ubicados en comunidades en desventaja y convertirlos en negocios productivos''.

El mandatario estatal, quien coordina los trabajos sobre migrantes en la Conferencia Nacional de Gobernadores, refirió que el proyecto incluye formar una bolsa de inversión con fondos públicos y particulares a partir de un Consejo Binacional de Migrantes, que será el primero en funcionar desde enero en todo el país.

Otro de los proyectos del gobierno panista encabezado por Juan Manuel Oliva Ramírez es aplicar parte de esos recursos en obra pública en las comunidades a través de un programa tripartito.

Este año, a través de ese programa se aplicaron 67 millones de pesos. ''La idea es que en 2007 se puedan aplicar 100 millones de pesos más con la participación de los migrantes y los gobiernos federal y estatal'', declaró el gobernador.

Sin emabrgo, para el presidente de la Comisión de Atención a Migrantes del Congreso de Guanajuato, Amador Rodríguez Leyaristi, tal proyecto ''de sangrar los bolsillos de los migrantes corre el riesgo de eximir al gobierno del estado de su responsabilidad, y ésa no debe ser la actividad del gobierno. Sólo debe ser un gestor y facilitador, pero no colgarse los proyectos de obra pública con el recurso de los migrantes''.

Según el legislador, obras de pavimentación, electrificación, agua potable y mejoras en los caminos se realizan con recursos de los connacionales, pero el gobierno informa de estos trabajos como si se hicieran con ingresos del estado.

El legislador dijo estar en desacuerdo con la forma en que el gobierno de Guanajuato busca el dinero de los paisanos. ''Está claro que los recursos de los migrantes no deben servir para sustituir las actividades primarias de todo gobierno en la creación de infraestructura rural o en obra pública. Ese dinero es muy importante para generar una actividad económica, siempre y cuando sea aplicado por los particulares. El gobierno no debe usar esos recursos para hacer las obras'', concluyó.

Mientras, el envío de remesas sigue en aumento y el gobernador de Guanajuato anuncia que se buscará ''potenciar ese recurso en proyectos para las comunidades de origen de los connacionales''.