Ese organismo decidirá en 2008 quién será el nuevo dirigente del blanquiazul
Prevén choque entre Calderón y Espino al renovar el Consejo Nacional del PAN
Con la renovación de su Consejo Nacional, el PAN registrará el próximo año la primera gran disputa por el control del partido. De entrada son dos las corrientes que pelearan la mayoría en este órgano de gobierno: la de los doctrinarios, encabezada por el presidente Felipe Calderón, y otra de carácter más conservador que tiene entre sus líderes al actual presidente del partido, Manuel Espino Barrientos.
Se trata de dos grupos que se enfrentaron en 2005 por la dirigencia nacional del partido y desde entonces han mantenido una lucha soterrada por el manejo del instituto político. El último incidente en esta historia de desencuentros se registró hace apenas unos días, cuando Espino Barrientos manifestó su rechazo al impuesto a los refrescos, medida que había propuesto Calderón como parte de su miscelánea fiscal.
Los propios panistas prevén que dicho enfrentamiento tendrá un nuevo capítulo durante la integración del Consejo Nacional que se llevará a cabo en junio de 2007, y estiman tal cosa porque se trata de conformar el organismo que tendrá a su cargo la elección del próximo presidente del PAN, en 2008.
Aquel grupo que logre tener el mayor número de consejeros podrá decidir quién será el jefe nacional del blanquiazul: uno que acompañe y apoye al gobierno de Felipe Calderón u otro que se confronte o que simplemente deje de respaldar a la administración pública federal.
Si bien la elección de los consejeros se realizará a mediados del año en una asamblea nacional ordinaria, los preparativos del proceso ya comenzaron. Los panistas interesados en hacer parte del organismo de gobierno tienen que inscribirse para participar en un proceso de evaluación que comenzó en noviembre y concluirá el 11 de febrero. Se trata de una prueba en la que los aspirantes tienen que demostrar sus conocimientos sobre historia, principios y estatutos de Acción Nacional.
Una vez que esta etapa haya concluido se efectuarán las asambleas municipales, las estatales y la nacional, en los que se elegirán a 300 integrantes del consejo. A ellos se sumarán los miembros ex oficio, entre los que se encuentran los ex presidentes del partido, los coordinadores parlamentarios, los dirigentes de acción juvenil y de promoción de la mujer, así como los consejeros que han sumado más de 20 años como tales.
Integrantes de la cúpula blanquiazul estiman que en la actualidad más de 50 por ciento del Consejo Nacional responde a los intereses de Manuel Espino. Para elegir al presidente del partido se requiere el voto de dos terceras partes de los consejeros. De ahí que la corriente de los doctrinarios considere necesario reducir la presencia del grupo de Espino, agrupación a la que se ha llegado a vincular con la organización de ultraderecha conocida como El Yunque.