El también director falleció el martes por la noche debido a un paro cardiaco

Sergio Jiménez es del tiempo en que había actores de verdad: Gómez Cruz

Le viviré eternamente agradecido, porque él me acercó a Juan Ibáñez, realizador de Los Caifanes

Una de sus últimas voluntades fue la donación de su acervo personal a la UNAM y a la Sogem

ARTURO CRUZ BARCENAS

Se fue el caifán mayor. Sergio Jiménez, actor de cine y televisión, pero conocido por actuar en Los Caifanes, película emblemática del cine mexicano, falleció la noche del martes en la ciudad de México a la edad de 69 años, debido a un paro cardiaco.

Jiménez, conocido por su interpretación de El Gato en esa cinta, dirigida por Juan Ibáñez en 1966, participó en más de 50 producciones fílmicas, así como en algunas telenovelas, como La antorcha encendida, Senda de gloria, El maleficio y El derecho de nacer, entre otras.

Le viviré agradecido: Gómez Cruz

"Sergio Jiménez pertenece a esos tiempos en que había que ser actor de verdad, hace 40 años. Tenía una capacidad histriónica fuera de duda", expresó Ernesto Gómez Cruz, actor que compartió protagónicos con Jiménez en Los Caifanes.

"Hizo el papel de padrote, pero éste es menos que un caifán; es un ser de la noche que se juega la vida en la calle", agregó.

Gómez Cruz añadió que a Jiménez le debe su acercamiento a Juan Ibáñez para actuar en Los Caifanes. "Me fue a buscar a Bellas Artes; le viviré eternamente agradecido. Me enteré tarde de su deceso. Me duele mucho.

"En tiempos de Los Caifanes fue un compañero apasionado. Después de la película cada quien agarró su camino. Yo me dediqué al cine, él, a la televisión; Eduardo López Rojas al teatro, y Oscar Chávez a sus canciones".

Gómez Cruz, quien actualmente desempeña el papel de El Comandante en el musical Aventurera, dijo: "Los Caifanes fue una película que impactó el ambiente cinematográfico de México, porque las puertas estaban cerradas para todas las propuestas innovadoras. Gracias a esa cinta, las puertas se abrieron y de ahí surgieron directores como Pepe Estrada, Jorge Fons y el propio Juan Ibáñez.

Consideró a Jiménez como un gran amigo, aunque subrayó que no lo frecuentaba. "Nos encontrábamos en los pasillos de Televisa y nos saludábamos; nos teníamos respeto. Pocas veces pude estar cerca de él. La verdad, cada quien se dedicó a lo suyo".

Añadió que a Sergio Jiménez "se le dieron muchas cosas dentro de la profesión; pero quiero reiterar que fue él quien me llevó con Juan Ibáñez, después de que llegué a la ciudad de México, procedente de Veracruz. Yo estaba barriendo en el teatro Comonfort. Imagínate si no le voy a vivir agradecido".

Con la claridad que le caracteriza, Gómez Cruz dijo: "en verdad que éramos actores, que sabíamos lo que en la escuela nos habían enseñado: amor al arte, amor al teatro y respeto a los compañeros, así como a la profesión. En ese tiempo había disciplina, sobre todo. Así debería ser, por los maestros como André Moreau. Fueron etapas que por fortuna me tocaron. Los que participamos en Los Caifanes siempre tratamos que nuestro trabajo se dejara ver en la vida, en la pantalla, en el teatro, donde fuera".

El papel de barrendero, aseguró, no lo encasilló, "pues siempre quise demostrar que podía interpretar diferentes personajes. No me clavé en el papel de Los Caifanes, que para mí es una película que causó mucho revuelo, pues a partir de ella pensé hacer cine de arte, un cine con mayor compromiso, lo que significa llevar una buena historia a la pantalla.

"Los premios lo demuestran. Los Caifanes prueban lo que es ser actor. No hallo la palabra exacta, quizás porque he hecho poco teatro. Cuando estudias teatro no te enseñan a promoverte; es ahí cuando la mayoría de los actores fracasan. Todo depende de la férrea voluntad y del ambiente con el que uno esté en contacto. Sergio Jiménez fue un buen actor, para mí fue un actor de primera línea, y eso lo demostró, no sólo de palabra. Ahí está su imagen en diferentes películas."

Para el histrión mexicano, sí se ha reconocido el papel de todos los actores que participaron en Los Caifanes: "cada quien según su capacidad, porque la película causó expectación, y a la fecha la siguen pasando y todos los comentarios son en el sentido de que fue una buena película. Se adelantó a su tiempo. Qué bueno que estuve ahí".

Aportación trascendental

El Profe Jiménez, como era conocido en el ambiente artístico, nació el 17 de diciembre de 1937 en la ciudad de México, y se le reconoce por haber dedicado su vida a formar talentos para la industria del entretenimiento.

Pidió con antelación que se cumplieran varios deseos, entre ellos, la donación de su acervo personal a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y a la Sociedad General de Escritores de México (Sogem).

Se trata de una colección de más de seis mil libros, además de películas y discos compactos, informó Violeta Blancarte, quien se desempeñaba como su contadora particular desde hace 11 años.

Con información de Notimex