Alarmas de artefactos explosivos en Bilbao y Tenerife crispan nervios de españoles
Hallan fuerzas de seguridad 80 kilos de explosivos en el norte del País Vasco
El escondite, cerca del lugar donde se encontró un bidón listo para ser usado como bomba
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Parientes de Carlos Alonso Palate lloran en Picaihua ante féretro con los restos del ecuatoriano muerto en Madrid por un atentado de ETA
Foto: Ap
Madrid, 5 de enero. Las fuerzas de seguridad hallaron este viernes en el País Vasco, al norte de España, 80 kilos de explosivos cerca del lugar en el que en la víspera encontraron un bidón con 100 kilos listos para ser usados por ETA como una bomba, a la que sólo faltaba el detonador.
Inicialmente, la Ertzaintza (policía autónoma vasca) encontró 20 kilos de nitrato de amonio dentro de un recipiente de plástico en un pequeño agujero en el suelo, en que también había detonadores, en un paraje boscoso de la pequeña localidad vizcaína de Atxondo, cerca de Bilbao. En un segundo agujero había mochilas vacías.
El hallazgo de 60 kilos de diferentes explosivos llegó poco después, en la misma zona, en que también se encontraron dos bolsas con medio kilo de cloratita en cada una, junto con manuales del tipo que ETA utiliza para la fabricación de bombas.
Al parecer, tanto el material encontrado la víspera junto a un coche con placas de matrícula falsificadas y piedras pequeñas para ser utilizadas, presumiblemente, como metralla, como el hallado de hoy, están relacionados con el escondite de ETA encontrado el pasado 23 de diciembre en una zona boscosa de la localidad, también vizcaína, de Amorebieta, que albergaba material para la construcción de bombas.
El escondite, según dijeron las fuerzas de seguridad, era reciente, es decir, de después de iniciado el proceso de diálogo entre el gobierno socialista español y la organización separatista armada.
El coche junto al que se halló durante la víspera el bidón con explosivos sería el que habrían utilizado los etarras que hicieron el escondite de Amorebieta, informó la Ertzaintza a la prensa.
Fuentes del Ministerio del Interior del gobierno regional vasco dijeron que "hay muchas líneas de investigación abiertas y cada uno puede darle el valor que quiera", al añadir que por el momento se desconoce si los explosivos hallados durante la víspera listos para ser usados estaban destinados para ser utilizados en un atentado contra personas o edificios.
El hallazgo de los explosivos de este viernes y el pasado jueves se produce después del atentado explosivo perpetrado el sábado pasado en el estacionamiento de la terminal 4 del aeropuerto de Madrid.
La explosión de una furgoneta bomba mató a dos ciudadanos ecuatorianos y produjo cuantiosos daños materiales.
Tras el atentado, el gobierno español, encabezado por el presidente socialista José Luis Rodríguez Zapatero, dio por roto el proceso de diálogo iniciado con ETA después de que la banda armada decretó un alto del fuego permanente en marzo.
En el aeropuerto de Madrid-Bajaras, los equipos de emergencia seguían trabajando para rescatar el cadáver de la segunda víctima del atentado, el también ecuatoriano Diego Armando Estacio.
El cuerpo del joven de 19 años de edad fue localizado a las 2 de la madrugada. Los servicios de emergencias informaron que la recuperación del cadáver sólo se realizará hasta éste sábado.
En tanto, las fuerzas de seguridad desalojaron el aeropuerto de Bilbao, después de que una llamada de teléfono avisó de la colocación de una bomba en las instalaciones de esa dependencia.
Sin embargo, el aviso de bomba se trató sólo de una falsa alarma. "La alerta y el dispositivo de verificación fueron suspendidos", dijo un portavoz de la Ertzaintza de Bilbao, no identificado por Afp.
Asimismo, un avión que se disponía a despegar desde Tenerife, en el archipiélago español de Canarias, fue desalojado este viernes luego de un aviso de bomba, informó el organismo responsable de los aeropuertos españoles, Aena.
La alarma fue expedida cuando el avión se disponía a despegar. Los pasajeros fueron "evacuados", precisó una portavoz de Aena, sin dar mayores detalles.
Por su parte, el líder de la ilegalizada coalición Batasuna, Arnaldo Otegi, consideró en entrevista publicada este viernes por el diario alemán Junge Welt que "no existe alternativa alguna a una solución política" al conflicto vasco.
El vocero consideró que el proceso de paz en el País Vasco atraviesa una "enorme crisis" después del atentado, pero cree que en estos momentos, pese a todas las turbulencias registradas, se debe buscar una "solución dialogada" para llevar la paz a una región necesitada de ella.
Así las cosas, la justicia española prohibió la celebración de un mitin convocado para este sábado por una organización próxima a la izquierda independentista vasca, en el velódromo de Anoeta, suburbio de San Sebastián, según fuentes judiciales.