Icono profano y religioso
UNA SERIE de fotografías exhiben en su entorno urbano a una de las imágenes más difundidas y plasmadas en este país por su alto valor religioso y simbólico: la Virgen de Guadalupe. La reina de México custodiada casi siempre por rosas y con su halo celestial perenne, habita no sólo en los aposentos sagrados del Tepeyac, sino que emerge de los muros de la ciudad de México. Así es como el artista de la lente Rafael López Castro revela las más "insospechadas metamorfosis del gran mito mexicano" representada el más estilo popular en las calles. La imagen religiosa fue captada en plantillas de cartón, laminas, muros, bardas, rocas o elaborada su figura lo mismo con alambres que lentejuela. Vestida del sol, Rafael López Castro, presentación Roger Bartra; Editorial Era, 160 pp. Precio de lista: 450 pesos.