En Nayarit y Sinaloa perpetran dos asesinatos más
Ejecutan en NL a otras dos personas, entre ellas un comandante policiaco
En hechos distintos pero que al parecer tienen vinculación con el crimen organizado, fueron ejecutados en Nuevo León un comandante de la Secretaría de Seguridad Pública del estado y el hijo de un jefe de sector de la Policía Estatal de Caminos. En ninguno de los casos no hubo detenidos.
Se trata del comandante Eleazar Ruiz Vargas, de 50 años, quien el pasado 29 de diciembre participó junto con elementos bajo su mando y policías regiomontanos en tres balaceras que culminaron con la detención de supuestos narcotraficantes.
Ruiz Vargas viajaba acompañado del policía preventivo Rodolfo Sonora Blanco cuando sicarios los emboscaron y les dispararon ráfagas de fusiles AR-15.
El jefe policiaco murió en el ataque, mientras que Sonora Blanco resultó herido en la columna vertebral y en la mano derecha, por lo que fue trasladado a una clínica privada del centro de la ciudad, que está protegida por policías estatales.
Ruiz Vargas y el preventivo acudieron a las tres de la madrugada a la colonia Villa Mitras en respuesta a una llamada telefónica anónima de auxilio, según la cual en ese lugar se estaban cometiendo varios robos en vehículos ("cristalazos").
Sin embargo, al llegar a esa colonia fueron emboscados por sicarios que viajaban a bordo de dos camionetas tipo Silverado y Cherokee y de un auto Malibú. El policía preventivo logró pedir refuerzos por medio de su teléfono celular, pero los agresores no fueron encontrados.
En tanto, en el municipio de Linares fue ultimado de al menos dos disparos a quemarropa Elías Villarreal Carranza, de 24 años, hijo del jefe de sector norte de la Policía Estatal de Caminos, Elías Villarreal Alonso.
Según testigos, el joven se encontraba en el interior de un negocio de giro negro cuando salió para atender el llamado de unos individuos que estaban en un automóvil con vidrios ahumados, que sin bajar del vehículo y a corta distancia le dispararon en varias ocasiones, una de ellas en la frente.
Estas son las primeras dos ejecuciones del año aparentemente relacionadas con el crimen organizado en la entidad. Durante 2006, el año más violento en la historia del estado, 55 personas fueron asesinadas.
En Nayarit, la Procuraduría de Justicia estatal reportó el hallazgo del cuerpo del agricultor Jorge Acosta Hernández, de 32 años, en un terreno sembrado de mariguana, en el municipio de Ahuacatlán.
Cipriano Acosta Aragón, padre del occiso, señaló que como a las 11 de la mañana llegó a su domicilio (en Tetitlán) un hombre llamado Juan Machain para decirle que su hijo había tenido un accidente y estaba en el predio La Piedra Rajada y de inmediato se retiró.
Acosta Aragón acudió al lugar acompañado por otro hijo y encontró a la víctima con un disparo, lo cual comunicó a las autoridades.
La procuraduría detalló que 40 por ciento del terreno se hallaba sembrado con semilla de mariguana y en el restante 60 por ciento se encontraron restos del enervante, que aparentemente había sido ya cosechado.
En Sinaloa, un joven fue ultimado a tiros en la plaza central de la comunidad de San Pedro del municipio de Navolato, durante la noche del sábado. Elementos de la policía ministerial localizaron a pocos metros del lugar una pistola calibre 38 que al parecer usó la víctima para repeler la agresión.
Testigos indicaron que al menos dos jóvenes se acercaron a Francisco Avila Reyes, de 32 años, con residencia en San Pedro, y empezaron a dispararle, por lo que éste sacó el arma e intentó responder a la agresión. Agentes de diferentes corporaciones realizaron un operativo en el lugar, pero no encontraron a los homicidas.