Presenta la exposición Cadáveres exquisitos, en la que el público puede participar
Surge en el norte de la ciudad La maison du CoQ, centro cultural francófono
Ampliar la imagen Aspecto de la exposición Cadáver exquisito en La maison du CoQ Foto: Yazmín Ortega Cortés
En el norte de la ciudad, muy cerca del Metro Potrero, se encuentra un centro cultural francófono inaugurado hace apenas un año: La maison du CoQ que, además de ofrecer clases de francés y servicio de cafetería, tiene un espacio dedicado a exposiciones y en este momento se exhibe la muestra Cadáveres exquisitos, un trabajo que recupera aquella vieja idea de los surrealistas en el que una obra, escrita o gráfica, debería ser colectiva y no de un solo autor.
La exposición se encuentra en el primer piso del centro cultural y para llegar hay que pasar primero por la cafetería y echarle un ojo a los libros de viejo, en distintos idiomas, que se encuentran en los libreros. Antes o después de visitar la muestra se vale tomarse un café.
Ya en el primer piso una invitación recibe al visitante para que se sume a este proyecto y dibuje o haga lo que desee en tres pliegos de papel destinados para ello. Después se encuentran los trabajos en los que ya no se puede pintar pero sí se pueden ver, en los cuales trabajaron más de dos creadores.
Esta idea partió de un programa que se realizó los sábados llamado Expresión a cucharadas y en ellos se realizaron varios cadáveres exquisitos. Es un intento de responder a esa necesidad de no ser observadores pasivos, sino de llegar a una exposición y participar, lograr que la gente se involucre, dice Pável Psht, de 21 años y coordinador de las actividades culturales de La maison du CoQ, donde además de exhibiciones se han realizado conciertos, performances, obras de teatro, danza, cinevideo, talleres como el de clown, de teatro, escultura y pintura, además de tambor y danza africana. Las actividades académicas son coordinadas por Ivonne Castro y la administración está a cargo de Raquel Castro.
Cadáveres exquisitos, que concluye en febrero, es una muestra multidisciplinaria, que también atiende otra necesidad: la de nuevos espacios culturales en el norte de la ciudad. "El sur está atascado de cultura y en el norte no hay nada o casi nada. Como nosotros somos de esta parte de la ciudad fue decir '¿por qué tenemos que trasladarnos?' Mejor hay que hacer un cambio de lugares".
La muestra que hoy se encuentra ahí "es parte de un juego, de hacer el arte un poco más lúdico", añade Pável, quien reconoce que los visitantes reaccionan con temor cuando se dan cuenta de que ellos también pueden colaborar en la creación de una obra: "al principio como que les da miedo. No siempre estamos dispuestos a sacar algo de nosotros mismos así sea un círculo y una raya. Al final se animan y terminan pintando algo. Para nosotros es provocar que la gente se aleje un poco de los establecido porque a final de cuentas el arte es expresar".
En Cadáveres exquisitos participaron más de 20 creadores, entre ellos Jimena Ibarra, Aymar Alvarado, Iván Castro, Alejandro Alarcón, Víctor Hugo, Luc Desjardins, Marisol Flores, Orlando Ramírez, David Mitre y Juan Carlos Lemus.
Las actividades de La maison du CoQ se financian con las clases de francés que ahí se imparten, otras actividades tienen un costo simbólico pero las exposiciones son gratuitas.
Este espacio va caminando, coinciden Pável y Luc, "porque la fachada no es institucional, mucha gente entra a la cafetería que funciona como un gancho, se asoman. Si ponemos cultura se asustan, pero poco a poco se van dando cuenta de lo que es: una casa de todos para hacerla entre todos".
La maison du CoQ se encuentra en real del Monte 138, Colonia Guadalupe Insurgentes, a unas cuadras del Metro Potrero (línea verde). Los teléfonos son 2453425 y 2453426 y el correo electrónico [email protected].