No cumplen con normatividad proyectos de inversión
Con Pidiregas se eluden controles de la deuda pública, dice la ASF
Los proyectos de infraestructura pública financiados con recursos privados, conocidos como Pidiregas, "se han utilizado para eludir los controles de la deuda pública federal y para iniciar proyectos de inversión sin cumplir con la normatividad que los rige, hasta alcanzar un valor aproximado de 1.5 billones de pesos", alertó el titular de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), Arturo González de Aragón.
En tanto, informes del gobierno federal indican que el endeudamiento del sector público a través de Pidiregas registró un crecimiento de 286 por ciento en los últimos seis años, para situarse en casi 558 mil millones de pesos al término de 2006, unos 52 mil millones de dólares.
Este mecanismo de financiamiento fue inventado durante el gobierno del expresidente Ernesto Zedillo, como un medio para utilizar menos recursos presupuestales en la inversión de obras de infraestructura y, en forma paralela, ampliar la participación del sector privado en áreas bajo responsabilidad del Estado.
Al término de aquel sexenio, la deuda pública extrapresupuestal por el uso de Pidiregas se ubicaba, en moneda nacional, en 14 mil 300 millones de pesos que representaban 2.7 por ciento del Producto Interno Bruto de 2000, según informes oficiales.
Sobre la misma línea de continuidad, al concluir el gobierno del expresidente Vicente Fox la deuda pública derivada del uso de Pidiregas ascendió a 558 mil millones de pesos, una cantidad equivalente a 6.1 por ciento del PIB de 2006.
El uso intensivo de este mecanismo de financiamiento, en la pasada administración gubernamental, anuló la reducción que por alrededor de 20 mil millones de dólares registró la deuda externa presupuestal del sector público durante los últimos seis años. En noviembre de 2006 el saldo de este endeudamiento, sujeto a estrictas normas y a la aprobación de la Cámara de Diputados para su contratación, se ubicaba en casi 50 mil millones de dólares.
Mientras tanto, entre 2001 y 2006, la deuda externa por el uso de Pidiregas, contraída fuera del presupuesto, aumentó en 38 mil millones de dólares, casi el doble del monto en que disminuyó el endeudamiento público externo presupuestal.