"Un museo debe representar a la comunidad en la que está inmerso"

El vínculo entre ciencia y sociedad, motor del esfuerzo en Universum

Es la semilla para nuevos proyectos en México y Latinoamérica: Julia Tagüeña

GABRIEL LEON ZARAGOZA

Con la meta fija de renovarse o morir, el Museo de las Ciencias Universum de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) celebra sus primeros 14 años de ser un firme vínculo de divulgación científica entre la máxima casa de estudios y la sociedad mexicana, y para consolidar esta relación se valora la creación de nuevos espacios con el fin de ofrecer innovadores contenidos en su próximo aniversario.

En su corta vida, este recinto universitario de divulgación científica ha recibido a más de 8 millones de visitantes, quienes no han presenciado cambio alguno en las políticas iniciales de comunicación de la ciencia, pero sí en el de la metodología.

"Hemos aprendido, nos hemos vuelto expertos en hacer equipamientos, y ha habido una reflexión de los objetivos del museo. En ese sentido sí ha habido un cambio, ahora se tiene clara su ubicación en la sociedad", apuntó Julia Tagüeña, directora general de Divulgación de la Ciencia.

Desde el 12 de diciembre de 1992, este espacio de aprendizaje lúdico ha alcanzado el logro fundamental de ser, en materia de ciencia, un referente importante en la sociedad, con la claridad de que la labor de investigación científica y tecnológica debe ser difundida y compartida con amplios sectores, destaca.

"Continuamente tenemos visitas de niños, jóvenes y familias, que creen que éste es un espacio que vale la pena ser visitado y eso sólo se consigue con el paso del tiempo", expuso la funcionaria universitaria.

Este reconocimiento social, comentó, ha sido posible con la renovación de las salas y la creación de nuevos espacios del recinto popularmente conocido como Universum. Además de una permanente serie de actividades, porque, dijo, un museo vivo no se forma sólo de exposiciones sino que también cobra vida con talleres, obras de teatro y demostraciones.

Desde la creación de Universum se han perfeccionado estrategias; aumentó la masa crítica, el número de expertos y la estructura de profesionalización, todo en un contexto internacional donde cada vez hay mayor respeto a la divulgación, para que la sociedad esté comunicada y unida a los proyectos, los entienda y apoye.

El Museo de las Ciencias surgió de un grupo de visionarios que buscaban que la máxima casa de estudios tuviera un espacio de ciencia y tecnología. De forma paralela, en el entonces Centro Universitario de Comunicación de la Ciencia se registró un movimiento en la misma dirección.

Años después, ese centro se convirtió en la Dirección General de Divulgación de la Ciencia, para incluir otros aspectos. Hoy, ocupa todos los medios: museos, publicaciones, prensa, Internet, radio y televisión.

Patrimonio del mundo

En el inmueble también se desarrollan actividades académicas, pues es sede del posgrado en Filosofía de la Ciencia; además, desde hace casi 12 años en él se imparte el diplomado en Divulgación de la Ciencia.

Julia Tagüeña expuso que se ha desarrollado un modelo local de divulgación científica, el cual reúne los paradigmas de la ciencia contemporánea y los conocimientos mundiales, con los problemas locales, aspectos culturales propios e inclusive actitudes y valores de cada lugar. "Tenemos muy claro cómo un museo debe representar a la comunidad en la que está inmerso, aunque la ciencia es un patrimonio de la humanidad".

Entre los éxitos que también se apunta el espacio universitario está el que su personal ha asesorado proyectos en diversas entidades del país y Latinoamérica; además de que sus colaboradores construyeron hace diez años el museo de La Luz, en el Centro Histórico de la capital del país, y el Museo Chiapas de Ciencia y Tecnología, que abrió sus puertas en octubre del año pasado y que le significó al Universum una proyección incuantificable.

El recinto cultural chiapaneco fue entregado a la población de la entidad y estará operado por el Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología del Estado. "Estamos orgullosos de este museo, porque pusimos en él toda nuestra experiencia, en él se nota todo lo que hemos aprendido", expuso la directiva.

Como parte de los retos venideros del Universum, está el buscar derribar las fronteras de la exclusión, es decir, ofrecer algo para todos, incluyendo a los que no pueden ir al museo o a los que tienen capacidades diferentes. Para ello se introducirán cédulas en sistema Braille y el personal del inmueble han sido capacitados para dar recorridos en lenguaje de señas para sordomudos.

Se cuenta también, abundó, con programas para llevar talleres, obras de teatro y conferencias a escuelas y lugares abiertos; se ha atendido la página electrónica del museo, que el año pasado recibió el reconocimiento AMIPCI 2006 como una distinción a la calidad de los productos y servicios de Internet en México, en la categoría de arte, cultura y educación.

Como parte de su proceso de renovación paulatina con miras a celebrar los primeros tres lustros de vida, el Universum cuenta ya con nuevos espacios, como el infantil, para pequeños de hasta seis años.