Ordenan auditar puntos sensibles
La Comisión de Vigilancia de la Cámara de Diputados ordenó a la Auditoría Superior de la Federación (ASF) revisar las finanzas en las áreas de alto riesgo para el gobierno federal, como Pidiregas, fondos y fideicomisos públicos, Pemex, pensiones, excedentes petroleros, sector eléctrico y en los recursos públicos transferidos a estados y municipios.
Al presentar el programa anual de trabajo de la Comisión de Vigilancia publicado en la Gaceta Parlamentaria, se dio a conocer la urgencia de incrementar el número de auditorías a los poderes Legislativo y al Judicial de la Federación, con el objetivo de esclarecer el destino de los cuantiosos recursos públicos que ambos administran.
El órgano fiscalizador solicitará, durante el presente año, a la Secretaría de la Función Pública que realice estudios para establecer indicadores de corrupción y niveles de desempeño de las entidades públicas, con el propósito de diseñar programas especiales de revisión aplicables a los tres poderes.
De tal forma, la Auditoría Superior de la Federación estará obligada a entregar su programa anual de actividades para ser evaluado desde la Comisión de Vigilancia.
De esta forma se daría seguimiento puntual a la actuación de la ASF y se despejaría cualquier posibilidad de opacidad en sus labores, al revisar el desempeño de los servidores públicos que ahí laboran.
Entre los pendientes de la ASF se haya el informe del resultado de la revisión de la Cuenta Pública 2005, que deberá ser desglosado por Arturo González de Aragón, titular de la auditoría, y que por ley depende de la Comisión de Vigilancia de la Cámara de Diputados.