DISQUERO
Carne percusiva
El compositor soviético Rodion Schedrin (1932) recibió el encargo del coreógrafo cubano Alberto Alonso de escribir la música para una coreografía basada en la novela de Merimée, para que la bailara la legendaria Maya Plisetskaya, esposa de Schedrin; éste no pudo sustraerse al embrujo capturado por Bizet en su ópera y dejó de lado el original del escritor francés para elaborar una de las partituras más espectaculares, profundas y bellas de la historia del ballet. En 41 minutos transformó las melodías bizetianas en ritmos poderosos. Escrita para orquesta de cuerdas y 47 instrumentos de percusión, aparece como la versión más impresionante que se haya hecho en música de la ópera Carmen. Vale la pena retomar el álbum, ya recomendado en el Disquero: una grabación realizada por la Orquesta Nacional de Rusia bajo la dirección de Mikhail Pletnev, en Deutsche Grammophon.