Proponen conformar un frente nacional para detener el neoliberalismo
Más de 600 organizaciones suscribirán pacto "por la restitución de la legalidad"
El nuevo movimiento social logrará cambiar el rumbo del país: González Casanova
Ampliar la imagen Martín Esparza, secretario general del Sindicato Mexicano de Electricistas, durante el discurso inaugural del cuarto Diálogo Nacional Foto: Yazmín Ortega
Más de 600 organizaciones sociales, campesinas, indígenas, sindicales y populares de todo el país se reunieron ayer en el auditorio del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) para crear un pacto nacional "por la restitución de la legalidad constitucional y la soberanía popular".
Congregadas en el contexto del cuarto Diálogo Nacional, las organizaciones propusieron crear una unión nacional para frenar "el neoliberalismo y sus políticas contrarias a los intereses de los trabajadores".
En el acto inaugural, oradores de diferentes organizaciones sociales expresaron sus inquietudes, problemáticas y necesidades particulares y colectivas.
En la jornada de hoy, a partir de las nueve de la mañana, se instalarán siete mesas de trabajo, en las cuales se diseñará el pacto nacional y se fijará un plan de acción. Mañana, día en que se conmemora la promulgación de la Constitución, ambos serán presentados en el Hemiciclo a Juárez.
El discurso inaugural fue pronunciado por el secretario general del SME, Martín Esparza Flores, quien llamó a las organizaciones sociales a unificar esfuerzos "para detener el avance de la derecha neoliberal".
"Debemos evitar la dispersión de fuerzas. Nuestro gran error continúa siendo la división, que impide el avance y las acciones sociales contundentes. Hagamos, más que un pacto social nuevo o una propuesta de reforma política, una práctica social unitaria", destacó.
En el presídium estuvo Pablo González Casanova, integrante de la organización Paz y Democracia, grupo adherente al Diálogo Nacional. Aunque el ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México no participó como orador, manifestó a la prensa que el movimiento social que ha surgido en el país va a lograr cambiar el rumbo de la nación y abatir las políticas neoliberales establecidas.
"Vamos a ganar, porque ya estamos en una etapa en que el neoliberalismo no engaña a nadie, ni siquiera a quienes lo preconizan como política para resolver los problemas sociales y nacionales. Todo el mundo tiene claro que el neoliberalismo es una de las grandes mentiras de la humanidad, ardid auspiciado por econometristas, seudocientíficos, publicistas y políticos que por un momento engañaron a la gente con un proyecto de democracia que es deseado por todos pero que ahora revela que es una política que produjo los mismos resultados que había generado el liberalismo económico del siglo XVIII: enriquecer a los que eran ricos y empobrecer a los más pobres."
Necesario, un encuentro de reflexión y análisis: sindicato minero
Carlos Esquer, secretario de acción política del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana, transmitió al auditorio un saludo de Napoleón Gómez Urrutia, secretario general de dicho sindicato que fue destituido durante la administración de Vicente Fox. El sindicalista demandó hacer del Diálogo Nacional "una reunión de reflexión, análisis y acuerdo que, mediante un pacto político nacional, exprese el sentir del pueblo mexicano". Asimismo, dijo que el sindicato minero está unido y "en pie de lucha", y que "todos los ataques a nuestra dirigencia son una cortina de humo para distraer la atención del homicidio industrial que ocurrió en Pasta de Conchos".
Otra de las oradoras fue la senadora Rosario Ibarra de Piedra, quien insistió en la necesidad de que las fuerzas sociales se unan para derribar el neoliberalismo, y pidió "volver los ojos a América del Sur y ver cómo se están levantando los pueblos". Aseguró que es falso aquello de que "los pueblos tienen el gobierno que merecen, y eso lo van a demostrar los mexicanos".
Por su parte, la vocera de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), María del Carmen López, recordó que con la marcha de ayer en la capital oaxaqueña, en apoyo de la organización, "queremos decir que el pueblo del estado ha vuelto a tomar las calles, que la lucha sigue y que no concluirá hasta que logremos la salida de Ulises Ruiz Ortiz del gobierno de nuestra entidad. Obtengamos los cambios necesarios para Oaxaca y la liberad incondicional de nuestros presos políticos, así como la aparición con vida de nuestros desaparecidos. Nosotros necesitamos al pueblo de México y por ello nos unimos a este esfuerzo nacional como espacio que ofrezca a nuestros pueblos y trabajadores recuperar la patria".
A su vez, Trinidad Ramírez, representante del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra, de San Salvador Atenco, propuso como acuerdo del Diálogo Nacional "el apoyo de todas las organizaciones para pronunciarse por la libertad absoluta e incondicional de todos nuestros compañeros encarcelados en La Palma y Santiaguito". Por otro lado, señaló que la contraofensiva al gobierno "ilegítimo" tendrá que darse en varios frentes. "No sólo desde la movilización, sino desde la utilización de todos los esfuerzos autogestivos, autorganizativos y autonómicos que existen en lo social, en lo cultural y en la educación. Asimismo, en niveles micro y macro, en lo privado y en lo público, sin caer en posiciones sectarias que califiquen la acción en el parámetro de lo revolucionario o lo reformista".
En el encuentro también se demandó un incremento salarial de emergencia, en respuesta al alza de los precios de productos de la canasta básica, así como protección a los recursos naturales y defensa de la soberanía nacional.