El Supertazón 41 será observado hoy por unos mil millones de espectadores
Osos y Potros, el duelo definitivo
Manning, por romper el maleficio de no coronarse
Indianápolis, favorito; Chicago, la víctima
Ampliar la imagen El quarterback de Chicago, Rex Grossman (izquierda), y Peyton Manning, de Indianápolis, vivirán hoy el juego más importante de sus carreras Foto: Ap
Miami, 3 de febrero. Llegó el día y este domingo se conocerá al nuevo campeón de la NFL, cuando Potros de Indianápolis y Osos de Chicago protagonicen en el Dolphin Stadium de Miami la edición 41 del Supertazón.
Unos mil millones de espectadores en todo el mundo seguirán el encuentro, en el cual la poderosa ofensiva de Indianápolis (15-4), campeón de la Conferencia Americana, dirigida por el sobresaliente mariscal de campo Peyton Manning, lidiará contra la defensa de Chicago (15-3), monarca de la Nacional.
Los Potros llegan tras derrotar a Patriotas de Nueva Inglaterra con marcador de 38-34, mientras los Osos dejaron en el camino a Santos de Nueva Orleans (39-14).
El conjunto de Indianápolis arriba al gran día por primera vez desde el lejano triunfo en el quinto Supertazón (1971), cuando pertenecía a Baltimore, y Chicago regresa después de haber ganado en la vigésima edición, en 1986.
Indianápolis y Chicago se enfrentaron por última vez hace tres años. En aquel entonces ganó Potros en territorio de Osos por 41-10.
El duelo de Manning y el quarterback de Chicago, Rex Grossman, promete robarse la atención de los aficionados y televidentes de 232 países y territorios, ya que 54 emisoras transmitirán el juego en 33 idiomas.
Manning es uno de los mariscales más experimentados de la liga en pases con precisión, ya que es el único en la historia de la NFL con 3 mil yardas en cada una de sus primeras ocho temporadas.
Empero, el hombre récord deberá terminar con el estigma de no haber podido ganar nunca un Supertazón, pues una derrota lo emparejaría con el ídolo local Dan Marino en el debate sobre los grandes mariscales de campo que jamás levantaron el trofeo Vince Lombardi.
Grossman, por su parte, sólo lleva tres años en la liga y basa su esperanza en su fortaleza y juventud. Su desempeño en la campaña regular fue inconsistente, pero en los dos juegos previos de playoffs su actuación fue fundamental.
Por su parte, el entrenador de Potros, Tony Dungy, tiene los pies sobre la tierra, y aunque sueña con levantar el ansiado trofeo sabe que no va a ser fácil, pues tendrá enfrente a un rival respetable, sobre todo por su defensa y su homólogo contrario y amigo personal, Lovie Smith, en la histórica final de un Supertazón con dos coaches afroamericanos.
¿Doble campeón?
Dungy cuenta con un anillo de campeón con Acereros de Pittsburgh en la edición 13, al vencer a Vaqueros de Dallas 35-31 en 1979.
El estratega de Potros podría convertirse en apenas el segundo coach en ganar un Supertazón, primero como jugador y luego como entrenador, luego de que Mike Ditka lo obtuvo con Dallas en la sexta edición, y posteriormente como coach de Chicago en la vigésima justa.
Smith también tiene un título cuando se desempeñaba como coordinador defensivo de Carneros de San Luis, que derrotó a Titanes de Tennessee en la edición 34.
El conjunto de la Herradura luce como favorito, pero el choque pronostica un encuentro al estilo de una batalla sin cuartel. Los números y las estadísticas quedan completamente de lado. Frente a frente estarán la segunda mejor ofensiva de toda la liga, la de Indianápolis, contra la defensiva número dos de la NFL, la de Chicago.
En la víspera del partido, los jugadores Bruce Matthews, Michael Irvin, Thurman Thomas, Roger Wehrli, Charlie Sanders y Gene Hickerson fueron elegidos para el Salón de la Fama de la NFL, y serán exaltados en una ceremonia programada para el 4 y 5 de agosto.