Crecerán gastos por seguridad pública, infraestructura y aspectos sociales, destaca
S&P: más deudas presionan este año a gobiernos municipales
Menciona entre los casos más dramáticos a Tijuana, por la violencia; Oaxaca, por problemas presupuestales derivados del conflicto social; Ciudad Juárez, que requiere fuertes inversiones
Los gobiernos municipales deberán incurrir en un mayor endeudamiento durante 2007, presionados por los crecientes gastos en seguridad pública y rezagos en infraestructura y otros renglones sociales, adelantó la firma calificadora Standard&Poor's, en un análisis de seguimiento del comportamiento de las finanzas de autoridades locales.
Durante 2006, el gasto de inversión en términos generales se contrajo 3.5 puntos porcentuales respecto de 2001, mientras la deuda como porcentaje de los ingresos propios se elevó 7 por ciento, según la calificadora.
Los casos más dramáticos que se plantean son los de Tijuana, donde ''la ola de violencia es la principal preocupación del municipio y el sector empresarial'', mientras en Oaxaca ''se registran presiones presupuestales derivadas del conflicto social en el estado''. En Acapulco se identifica el cambio de administración, a finales de 2005, la escalada de violencia y el mal estado de la Autopista del Sol.
Si bien Standard and Poor's presta servicios de calificación y riesgo de deuda en apenas 48 municipios de los 2 mil 439 que existen en el país, la situación no es muy diferente para la generalidad. ''Hay muchos (municipios) que no cuentan con una calificación de riesgo crediticio, lo cual disminuye sus posibilidades de financiar en condiciones más favorables, por ejemplo, su infraestructura básica'', aclara el estudio Estabilidad en calificaciones de municipios mexicanos durante 2007, realizado por la calificadora.
Poca eficiencia en recaudación
Precisa que durante el año pasado los gastos operativos de los municipios mexicanos crecieron a tasas más elevadas que los ingresos operativos; es decir, la recaudación de impuestos locales ''no fue suficientemente eficiente'', sumado a que las transferencias recibidas (de los gobiernos estatales y federal) ''no lograron equiparar el crecimiento de los gastos operativos'', en particular aquellos utilizados en salarios, gastos para atender la seguridad y gasto social, entre otros renglones.
Mención especial merecen Saltillo y Oaxaca: ''Factores financieros y políticos han provocado que dichos municipios se encuentren en una situación que podría afectar su capacidad y voluntad de cumplir en tiempo y forma con sus obligaciones financieras. Adicionalmente, en el caso del municipio de Oaxaca, se le retiró del listado de Revisión Especial con implicaciones negativas, y se le asignó una perspectiva negativa debido a que continúa la disminución de la actividad económica local, como resultado del actual conflicto político-social, y aunque no se cuenta con suficientes indicadores financieros para determinar en qué medida se han visto afectadas las finanzas pública, se estima que podría haber un impacto en el desempeño presupuestal durante 2007''.
El estudio de Standard and Poor's también menciona a Ciudad Juárez, donde ''las ya de por sí fuertes necesidades de inversión se han visto incrementadas por los desastres naturales''. Sobre Los Cabos se menciona su vulnerabilidad al paso de los huracanes; de Hermosillo, que tiene un elevado nivel de endeudamiento; sobre Navojoa dice que tiene una limitada flexibilidad financiera y se prevé una ''sensible'' disminución en el gasto de inversión; a Querétaro le afectará la ausencia de un fondo de pensiones, así como el ''desafío permanente de asegurarles a sus habitantes un óptimo servicio de agua a largo plazo''.
Otros municipios con riesgos son: Cuernavaca, que registra presiones sobre el gasto municipal asociadas a la provisión de servicios públicos; Mérida, que también sufre presiones asociadas con el crecimiento en el gasto de servicios personales y la provisión de servicios públicos; en San Luis Potosí se identifican bajos ingresos propios, inferiores al promedio (nacional) y pasivos contingentes asociados al sistema de pensiones municipal y del organismo de agua; Atlixco, a su vez, enfrenta rezagos en la cobertura de infraestructura básica y urbanización, y en el caso de Tlalnepantla se menciona que allí el ''pasivo contingente más significativo es el organismo de agua del municipio'', además de que reporta una débil situación financiera.