Con dos tantos de Biscayzacú, Potros llega a seis unidades
Tres derrotas consecutivas de Rayados
Con dos goles del uruguayo Gustavo Biscayzacú, el Atlante obtuvo una fácil victoria de 2-0 sobre un decepcionante Monterrey, en duelo realizado ante gradas vacías en el estadio Azteca. Por cierto, las cuatro anotaciones de Potros en la campaña han sido anotadas por el Grillo.
Los locales obtuvieron su segundo triunfo y llegaron a seis puntos en el grupo dos, mientras los Rayados sufrieron su tercera derrota consecutiva y se quedaron con tres en el mismo sector.
"Por un juego limpio también en las tribunas", se leía en una manta que circuló antes de iniciar un partido, el cual se empezó a definir temprano.
Los locales se mostraron ofensivos y buscaron la meta rival, que consiguieron horadar al 16. Fue con algo de suerte, ya que el Grillo aprovechó un rebote de la defensa y, dentro del área, le pegó al balón con rodilla, tibia y pie y venció a Christian Martínez con disparo a la derecha.
La Pandilla intentó responder con varios elementos a la ofensiva, pero el argentino Rolando Zárate y el colombiano Hugo Rodallega se vieron muy apáticos.
Con amplio dominio local, hasta el zaguero Mario Hernández Lash se lanzó al ataque y su cabezazo pasó cerca del poste izquierdo, luego de un centro de Eduardo Rergis.
Al 40 el árbitro Jaime Herrera dejó a ambos equipos con 10 elementos, al expulsar a Gustavo Enríquez y al visitante Luis Pérez, luego de una barrida y encontronazo en media cancha.
Cuando iban 16 segundos del segundo tiempo, los Potros tomaron dormidos a los regios y marcaron el 2-0, en un balonazo a banda derecha que fue rematado con la cabeza por Biscayzacú, pero su remate salió directo a Martínez, quien logró rechazar, pero el esférico cayó otra vez al Grillo que fusiló con potente disparo.
Por los regios el único que mostró reacción fue el argentino Leandro Gracián, quien desbordó por el centro y mando sendos disparos que su compatriota Federico Vilar desvió a tiro de esquina y se ganó los gritos de ¡Vilar-Vilar! de los integrantes de la Tito Tepito.
El Piojo Herrera, castigado en un palco, relevó a los intrascendentes Zárate y Rodallega, pero la mejor ocasión fue para el cuadro de José Cruz, en un cabezazo del joven Adalberto Robles que se estrelló en el larguero, al 85.