Foro de análisis en la Asamblea Legislativa del DF
El gobierno capitalino debe tener frecuencia de radio: especialistas
Académicos, profesionales de la comunicación y especialistas de los medios electrónicos de comunicación coincidieron, con sus matices, en que el Gobierno capitalino debe contar con sus propias frecuencias de radio y televisión, las cuales deberán estar ajenas a cuestiones políticas o partidistas, y operar como medios públicos que constituyan la voz de los ciudadanos y coadyuven al mejoramiento de sus condiciones de vida.
En el marco del foro de análisis de la iniciativa para crear el Instituto de Radio y Televisión para el Distrito Federal, organizado por la fracción de la Coalición Socialdemócrata de la Asamblea Legislativa (ALDF), los participantes resaltaron la necesidad de constituir medios de difusión públicos que sean alternativa al duopolio de Televisa y Tv Azteca, pues estos sólo protegen sus intereses y no los de la ciudadanía.
Para el investigador de la Fundación Friederich Ebert, Juergen Moritz, actualmente dos familias controlan prácticamente todo el espectro televisivo en el país, los Salinas Pliego y los Azcárraga, mientras que otras 14 familias hacen lo mismo en la industria radiofónica, por lo que consideró que "sin medios democráticos no hay democracia".
De ahí que se pronunció en favor de rescatar los medios públicos, entre los cuales estaría la radio y televisión del gobierno de esta ciudad. Inclusive afirmó que es falso el argumento de las autoridades federales de que está saturado el espectro radiofónico en esta ciudad, pues hay estudios que demuestran lo contrario.
En su oportunidad, el académico de la UAM, Enrique Velasco, consideró fundamental que en el Distrito Federal se pueda contar con un instituto de radio y televisión, desde el cual se tengan sus propios medios de difusión y sirvan de contrapeso a la "estulticia y la basura" que caracteriza al duopolio televisivo.
El dramaturgo, Salvador Flores, se lamentó de que se haya dado un "silencio ominoso" por parte de muchos funcionarios públicos que vieron perder la frecuencia radiofónica del GDF y no hicieron ni dijeron nada.
Mientras, Fausto Cantú Peña, integrante de la Red Mundial por la Paz, resaltó que una radio y televisión públicas deben ser primordiales para formar conciencia y contribuir a perfeccionar la democracia.
A la par, Enrique Lazacano, de la Academia Mexicana de Periodistas de Radio y Televisión, se pronunció a favor de recuperar la experiencia del IMER como radio pública, durante todo el proceso de maduración de las propias frecuencias del gobierno de esta ciudad.
Para ello, dijo Hugo Morales, responsable de Comunicación Social de la Comisión de Derechos Humanos del DF, se tendrá que remar a contracorriente de lo que hoy en día imponen las televisoras y radiodifusoras comerciales, y no espantarse por los gritos que pudieran dar al verse amenazados sus intereses.