Presentaron redición del libro Las herencias ocultas, del escritor y periodista
Monsiváis: laicismo, tolerancia y crítica al poder, herencia de la Reforma
El autor del volumen es ''el último liberal del siglo XIX'', dijo El Fisgón
Desde el siglo XIX, la fuerza creativa y crítica de los liberales mexicanos de la Reforma se hizo escuchar hasta el presente para echar luces de vigencia en asuntos como la necesidad de un Estado laico, la crítica a los poderes constituidos, la tolerancia y el respeto a la inteligencia.
Esa es una de las conclusiones que puede derivarse de la presentación del libro Las herencias ocultas. De la reforma liberal del siglo XIX (Debate-Random House Mondadori), de Carlos Monsiváis, que ofrece una revisión y ampliación de una primera edición hecha en 2000.
Aunque incluye otros capítulos, el objetivo central de este volumen es repasar la obra de algunos de liberales destacados: Benito Juárez, Juan Bautista Morales, Guillermo Prieto, Ignacio Ramírez, Ignacio Manuel Altamirano, Manuel Payno y Vicente Riva Palacio.
Durante la presentación en la Casa Lamm, Monsiváis citó algunas de las herencias de los liberales de la Reforma juarista que siguen vigentes, ''en espera del crecimiento de sus herederos, que no son pocos'', como ''la secularización, el laicismo y la laicidad''.
Y como ejemplo recordó que la Conferencia del Episcopado aseguró hace unos días que Felipe Calderón les prometió que en lugar de la ''libertad de cultos'' habría ''libertad religiosa'', que ellos definen como la decisión de los padres de familia de intervenir en la enseñanza de sus hijos, es decir, impulsar la educación religiosa en las escuelas públicas.
Otro caso de la necesidad de vigencia del laicismo mencionado por Monsiváis se observó cuando el secretario de Salud se manifiestó contra el uso de la píldora del siguiente y del condón.
''Si hay una historia de la derecha mexicana en los pasados 30 años es la historia de las derrotas culturales, una tras otra. Han querido prohibir las minifaldas, los aretes de los jóvenes, las fotos de desnudos, El crimen del padre Amaro, la píldora del día siguiente, el condón.''
Una herencia más de aquellos liberales es la crítica a los poderes constituidos, que respetaron ellos mismos cuando fueron funcionarios. Otra más es la tolerancia, ''una de las herencias más poderosas'' y que hoy, dijo el escritor, sigue ganando espacios.
También mencionó el respeto a la inteligencia, pues en los debates los liberales no excluían a los adversarios y, además, sus argumentaciones no eran dogmáticas. Alguna más es la idea del político como un intelectual y la creencia en la continuidad de la historia universal, sin una interpretación nacionalista.
Monsiváis criticó la ignorancia de la derecha mexicana actual, que sólo ataca a Juárez porque desconoce a los demás liberales de esa época. Inclusive, agregó, no conocen ni siquiera a conservadores como Lucas Alamán, Salvador Abascal o René Capistrán. ''No conocen su pasado'', exclamó, y advirtió que hoy existe un desconocimiento de la derecha ''como jamás se había dado''.
Forjar patria e identidad
En la presentación también participaron Rolando Cordera, Patricia Galeana y Rafael Barajas, El Fisgón, quien dijo que Monsiváis sabe que las herencias de la reforma liberal están ocultas porque forman parte de las raíces más profundas de México.
El caricaturista de La Jornada destacó que una parte muy importante de la obra de los grandes escritores liberales tiene la finalidad concreta de forjar una patria y una identidad nacional.
Consideró que Las herencias ocultas es un libro acucioso, divertido, que borda fino y es didáctico, ''en el mejor sentido de la palabra''.
El Fisgón también se refirió a la vigencia de la lucha de los liberales del siglo XIX, como la eliminación de los fueros esclesiásticos ante, por ejemplo, los casos actuales de pederastia por parte de sacerdotes.
''Los avances tanto reales como fraudulentos del conservadurismo mexicano a finales del siglo XX y principios del XXI, hacen muy vigente la lucha de los liberales del XIX.''
Al final, como una ''modesta contribución'' a Las herencias ocultas, el caricaturista hizo un esbozo biográfico de ese ''último gran liberal del siglo XIX'' llamado Carlos Monsiváis.
Y en broma dijo cosas como: ''Fue polifacético como Riva Palacio: militante, versificador, periodista satírico, historiador, cancionero. Como Payno, fue un liberal escéptico y convencido de las ventajas de la ironía ante los hipócritas, un costumbrista narrador de la impunidad, un archivo general de la nación.
''Como Altamirano, un soldado de la Reforma y un gran promotor cultural. Como Juan Bautista Morales, un personaje tardío de la Ilustración, un despiadado con fines altruistas y un adepto de las bondades regenerativas de la crítica.
''Como Guillermo Prieto, el relator de primera mano de hazañas históricas, sostuvo responsabilidades políticas muy diversas: fue patrocinador teórico y práctico de una literatura nacional. Luchó incesantemente por la libertad de expresión y mantuvo el sentido del humor en un medio solemnísimo.
''Es, en resumen, el modelo de un hombre de su tiempo, es decir, del siglo XIX. Y esto no lo digo por hablar bien de él, sino simplemente por respeto a sus canas. Y para que de ahora en adelante sea leído en el contexto de su generación.''