A la mitad del foro
Miércoles de ceniza
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El ex presidente Vicente Fox Quesada, en imagen de archivo
Foto: La Jornada
Hubo un "deterioro insostenible" de la seguridad en el país, dijo Felipe Calderón en Tlaxcala, durante la reunión de la Conago, ante gobernadores en cuyas entidades las fuerzas armadas se mueven al filo de la navaja. Menos mal que ahí mismo anunció el envío de iniciativas de reformas a la legislación vigente, para que el accionar del Estado no se sostenga de facto en el mando único del titular del Ejecutivo de la Unión: no sea el diablo, y vuelvan a ser polvo las garantías individuales antes del miércoles de ceniza.
Carnaval sangriento ante el abismo del estado de excepción. "Deterioro insostenible" en las funciones vitales del Estado: la seguridad pública, la seguridad nacional; territorios bajo dominio del crimen organizado: "o restablecemos el orden y las condiciones mínimas de seguridad, o México no saldrá adelante". Esa red llena de agujeros dejó la insolente alternancia de la ignorancia supina y el desprecio a la razón: no hay método en la locura de gerentes cegados por viejos y nuevos dogmas. O cabestrean o se ahorcan, señores gobernadores.
Pero en el Congreso y en el ágora electrónica se ocupan de las barbaridades que dice Vicente Fox: el 2 de julio, "18 meses después, me desquité cuando ganó mi candidato". Confesión de parte, claman en el PRD. Y Manuel Espino desempolva fascios para los arcos triunfales del democratizador Fox, estadista admirado urbi et orbi.
La guerra de Bush contra el terrorismo llega a México por Internet. Junto con Canadá y Venezuela somos proveedores de petróleo para el imperio de la verdad única. Y vino Michael Chertoff, secretario de Seguridad de Estados Unidos, para decirnos que nadie "puede ser complaciente ante las amenazas reales de los terroristas". Y para aplaudir lo hecho por Felipe Calderón en el combate al crimen organizado. Y para recordarnos que ellos tienen la obligación de aplicar sus leyes migratorias y ahora, además, incrementar la vigilancia y endurecer las medidas para evitar el paso de terroristas. En Washington hubo un voto en contra del incremento de tropas, anunciado por Bush. Y los auditores revelan fraude de 10 mil millones de dólares en contratos sobrevaluados y gastos no autorizados para "reconstruir Irak."
Carnaval de comunicación instantánea. Nunca imaginó Pedro Aspe inspirar a Hugo Chávez, quien elimina tres ceros al bolívar para aliviar la angustia por la inflación. Evo Morales y Lula acuerdan un nuevo precio al gas natural; no somos colonialistas ni poder hegemónico, dice el de Brasil. Felipe Calderón pone un tope a sueldos de altos funcionarios y los enemigos del antiguo presidencialismo omnímodo proclaman que nadie puede recibir un salario más alto que el del señor Presidente; intelectuales inorgánicos, ponentes del cambio gradual a régimen parlamentario, piden urgentes reformas para tener una Presidencia fuerte, y que el Congreso apruebe sus iniciativas de "reformas estructurales". Las ranas pidiendo rey.
Paco Gil asume cargo directivo en la multinacional española Telefónica. Y Alan García vende el avión presidencial en Perú, porque "es símbolo de frivolidad y sensualidad". En Tlaxcala, el heredero del deterioro insostenible declaró que México y Estados Unidos trabajarán en conjunto para resguardar áreas estratégicas. Ha dicho y repite que estamos en guerra y que su gobierno no dará un paso atrás. Dentro de unos días recibirá la visita oficial de George W. Bush, a quien traen a mal traer desde que perdió la mayoría en el Capitolio. "Es la economía, estúpido", fue el lema de campaña de Bill Clinton para derrotar a George H. W. Bush, padre. Hillary Clinton aspira a la candidatura del Partido Demócrata y dice el semanario británico The Guardian que el lema de su campaña tendría que ser: "es la guerra, estúpido".
Agustín Carstens, Luis Téllez, Josefina Vázquez Mota y José Angel Córdova acompañaron al Presidente a la reunión de la Conago. Este último tendría que curarse en salud. El de Hacienda tendrá que resolver sobre los ajustes que exigieron los gobernadores, con Fidel Herrera Beltrán a la cabeza, para que el flujo de recursos no lleve a subejercicios como el del presupuesto para la educación de 2006. Carga explosiva para Oaxaca, donde Ulises Ruiz pagó las consecuencias de la irresponsabilidad de quien despachaba en las oficinas que fueron de Vasconcelos. Ahí quedaron huellas de fraudes y abusos en los contratos del proyecto Enciclomedia. Josefina Vázquez Mota habló de "restricciones presupuestales" y reconoció lo dicho por Elba Esther Gordillo: no se capacitó a los profesores en el uso del sistema. Luis Téllez expuso la urgencia de un nuevo esquema de concesiones carreteras; de telecomunicaciones, nada.
Los gobernadores defendieron sus espacios de poder real; estados libres y soberanos, un federalismo con participación activa en lo fiscal. Reformas propuestas a un Congreso, en el que el Senado ya aprobó la iniciativa de Manlio Fabio Beltrones que fija plazo y condiciones a la reforma del Estado. El sistema plural de partidos está firme y éstos en crisis, que amenaza una regresión al más primitivo bipartidismo, el de la polarización dogmática. El PAN refrendó la titularidad del Poder Ejecutivo de la Unión, pero el poder intoxicó a los de la derecha extrema y en nombre de la pureza democrática se asumen inquisidores del gobierno de su partido.
El PRD se obstina en ser movimiento, reivindicar la "presidencia legítima" y desdeñar su quehacer en el poder constituido. El liderazgo de Andrés Manuel López Obrador se reduce a sombra bajo un árbol que da moras. Combates imaginarios y debates bizantinos sobre quién dijo o no lo que dicen que dijo. Yucatán desnudó el pragmatismo cínico de los conversos. Hay que atender al llamado de Luis Villoro a integrar un frente amplio... de izquierda. Asumir un cargo es integrarse al poder constituido. José Woldenberg acudió al 18 Brumario: "Cuando a la izquierda de su época (Carlos Marx) le decía: se comportan en el Congreso como si estuvieran en las calles, y cuando salen a las calles quieren que los respeten como si estuvieran en el Congreso."
Hoy votarán aproximadamente 17 mil consejeros del PRI y elegirán presidente y secretario general del Comité Ejecutivo Nacional. La contienda se reduce a Beatriz Paredes y Enrique Jackson. Larga militancia la de ambos. Paredes surgió de la CNC y llegó a secretaria general y gobernadora de Tlaxcala. Nativo de Sinaloa, Jackson ascendió en la escala política y administrativa; en el trance del poder perdido, coordinó a los senadores del PRI y navegó la tormenta de la descomposición del sistema incluyente y la fractura provocada por la falsedad de la sana distancia.
"A mi partido, mi cuota y mi voto", decían. Hoy votarán solamente los priístas. Adiós al infantilismo democrático de elecciones abiertas al sufragio de quienes no militaban, no eran del partido.
Los gobernadores ejercerán influencia sobre los consejeros. Donde no gobierna el PRI, éstos fueron designados por Roberto Madrazo. Pero mucha ingenuidad la de quien crea que hoy es posible la obediencia ciega a la línea que dicen imperaba cuando el PRI era hegemónico y el Presidente árbitro de última instancia. Ni entonces ni ahora.
Polvo eres... Y sacaron al PRI de Los Pinos. Pero ante la polarización de la guerra santa, hay quienes creen en la resurrección del tricolor.