El conflicto entre sunitas y chítas, el peligro más grave en la región, señalan
Irán y Arabia Saudita lucharán contra la conspiración para dividir a los musulmanes
Descarta la cancillería iraní diálogo bilateral con EU en la conferencia de Bagdad
Ampliar la imagen Mahmud Ahmadinejad, presidente de Irán (a la izquierda), al ser recibido por el jeque Abdallah, de Arabia Saudita, en el aeropuerto de Riad el fin de semana Foto: Ap
Riad, 4 de marzo. Irán y Arabia Saudita se comprometieron a luchar contra la "conspiración" para dividir a los musulmanes al advertir que el creciente conflicto entre sunitas y chiítas es el peligro más grave que se cierne sobre la región, durante la primera visita de Estado que el presidente iraní Mahmud Ahmadinejad realiza a este emirato.
Ahmadinejad fue recibido anoche por el jeque Abdallah, de Arabia Saudita, con quien conversó sobre los "complots enemigos" que quieren dividir al mundo islámico, y de las cuestiones palestina, libanesa e iraquí.
El mandatario iraní y el monarca saudita -uno de los grandes aliados de Estados Unidos- convinieron en oponerse a las tentativas de avivar el conflicto entre sunitas y chiítas, informó la agencia oficial saudita Spa tras el encuentro.
Según analistas sauditas, Riad y Teherán tratan de calmar a la región, en momentos en que las autoridades iraníes se encuentran bajo una fuerte presión occidental debido a su programa nuclear y los sauditas quieren evitar todo enfrentamiento militar entre Estados Unidos e Irán.
Durante una conferencia de prensa realizada hoy a su regreso a Teherán, Ahmadinejad declaró que Arabia Saudita e Irán habían decidido trabajar juntos para contrarrestar las conspiraciones enemigas destinadas a dividir al mundo islámico.
"Afortunadamente, nosotros y los sauditas somos conscientes de las amenazas de nuestros enemigos y las condenamos. Pedimos a todos los musulmanes que sean conscientes de estos complots y que estén alertas", añadió el presidente iraní.
En tanto, el vocero de la cancillería iraní, Mohammad Ali Hosseini, declaró que su país no ha previsto entablar conversaciones con Estados Unidos al margen de la conferencia internacional sobre la seguridad en Irak, que se celebrará en Bagdad y en la que todavía no sabe si participará. "No están previstos encuentros bilaterales (con los estadunidenses) al margen de la conferencia de Bagdad", declaró Hosseini, al tiempo que Estados Unidos también descartó esta posibilidad.
Washington aceptó participar en la conferencia contra la inseguridad en Bagdad, prevista para el 10 de marzo, pero Irán aún no ha dado su respuesta. "Si va en nuestro interés, participaremos", indicó.
En Nueva York, el vicecanciller norcoreano Kim Kye Wan, de visita en Estados Unidos desde el jueves pasado, dijo que su país está preparado para cerrar sus instalaciones nucleares y permitir el ingreso de inspectores.
Kim es el funcionario de Corea del Norte de mayor jerarquía en visitar Estados Unidos desde 2000.
También en esa ciudad estadunidense, el enviado sudcoreano Chun Yung Woo, declaró: "no creo que haya dudas sobre la preparación del Norte para ejecutar los pasos iniciales", en referencia a las medidas que Pyongyang ha acordado tomar en torno al cierre de sus instalaciones nucleares.