Reconoce que ha perdido batalla en el tema; "falacia progresista secuestra la capital"
Anuncia la Iglesia movilizaciones en favor de la vida
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El cardenal Norberto Rivera Carrera saluda a los asistentes a la misa dominical celebrada en la Catedral Metropolitana
Foto: Roberto García Ortiz
Auspiciado por la Iglesia católica, el Colegio de Abogados Católicos anunció que emprenderá movilizaciones luego de que las comisiones unidas de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) aprueben y presenten ante el pleno la iniciativa que pretende despenalizar en la ciudad la práctica del aborto en las primeras 12 semanas de concepción. Reconoció que están "perdiendo la batalla" en el tema, porque "el Distrito Federal está secuestrado por una falacia progresista".
En su homilía dominical, el arzobispo primado de México, Norberto Rivera, destacó la necesidad de que en el país prevalezca la ética del respeto a la vida, a la dignidad del hombre y a los derechos de las generaciones presentes y futuras.
Con el aval del cardenal, el presidente de la asociación civil Armando Martínez ofreció una conferencia de prensa en el interior de la Catedral Metropolitana en la que precisó que la Iglesia católica por conducto de sus laicos "ha decidido dar una batalla" en defensa de los derechos de la mujer y que en su movimiento van a confrontarse "con quien sea".
"Defendemos la dignidad y la vida de las mujeres. Es una falacia que 10 mil mueran al año en México por temas del aborto. Mueren por malos cuidados en sus embarazos. Son datos falsos y los confrontaremos", expuso.
Actualmente -agregó- sostienen una serie de encuentros con las fracciones del PRD y del PAN "para hacerles entender" que en el país se debe defender "una cultura de la vida y no de la muerte", como ocurriría, sostuvo, en caso de permitirse el aborto.
De no prosperar estos encuentros informó que una vez aprobada la iniciativa por el pleno legislativo -en el periodo de sesiones que iniciará el próximo día 15- acudirán a la controversia constitucional ante la Suprema Corte "y está vez, no perderemos la batalla como se perdió con la ley Robles", pero sobre todo, añadió, porque con las reformas jurídicas a la Constitución aprobadas por la pasada legislatura de Diputados "la interrupción de la vida no se permite".
Aceptó que en la capital la Iglesia pierde la batalla social ante los promotores y defensores de los derechos de la mujer, como ocurrió con la Ley de Sociedades de Convivencia, que "va a caer por su propio peso" porque es una ley para mil 200 personas en una ciudad de 20 millones", comentó.