Hay abusos sexuales, hacinamiento, extorsiones y robos, denuncia Sin Fronteras
Persisten violaciones a los derechos humanos en las estaciones migratorias
La organización Sin Fronteras -que atiende a indocumentados y a refugiados- denunció ayer que a pesar de la modernización de las estaciones migratorias de Tapachula, Chiapas, y de la ciudad de México las condiciones de detención "continúan siendo gravemente violatorias de los derechos humanos", persisten abusos sexuales, condiciones de hacinamiento, robos y extorsiones.
En visitas a esas estaciones, realizadas por personal de Sin Fronteras, se ha podido documentar que persiste la discriminación hacia mujeres; la separación de familias; servicios médicos limitados y abusivos; servicio de comida no equitativo y alimentos en mal estado; violencia sicológica, verbal y sexual; detenciones arbitrarias de extranjeros que cuentan con documentos legales para estar en el país, y abusos de policías estatales y municipales.
Los migrantes entrevistados por Sin Fronteras denunciaron haber sufrido robos, extorsiones, abuso de poder y usurpación de funciones de autoridades que realizaron la verificación migratoria y subsiguiente detención.
Presentaron informe
Al presentar ayer por la tarde el informe Situación de los derecho humanos de la población migrante en las estaciones migratorias de la ciudad de México y Tapachula, Chiapas, Sin Fronteras denunció que un adolescente fue violado por un policía auxiliar luego de ser retenido en las instalaciones del sur del país.
La organización Sin Fronteras reveló que en sus visitas de supervisión a las estaciones migratorias en 2005 y 2006 descubrió que en la ciudad de México estaban detenidas dos personas que mostraban padecimientos mentales, lo cual evidencia la falta de condiciones para retener a gente con necesida- des especiales.
También, abundó Sin Fronteras, en esa estación mujeres de Centroamérica fueron detectadas durmiendo en los pasillos, porque las autoridades dan preferencia para la ocupación de dormitorios y uso de regaderas a aquellas que por su nacionalidad permanecen más tiempo detenidas. "Esto es discriminación", subrayó.
Entre las violaciones a los derechos de los indocumentados destaca que al rendir su declaración ante autoridades no se les proporciona información sobre la utilidad de la misma; el motivo y el objetivo de fotografiarlos y tomar sus huellas dactilares, ni de los derechos que les asisten en las estaciones migratorias.
En otros casos, al rendir declaración los migrantes no cuentan con representante legal o persona de confianza, por lo que quedan en estado de indefensión.
Sin fronteras reprochó que la estación migratoria en Tapachula es utilizada como oficina administrativa, a pesar de que es nueva y uno de sus edificios está diseñado y equipado como "centro de salud".
"A pesar de que cada una de las áreas de la estación cuenta con un espacio para consultorio médico, durante nuestras visitas pudimos observar que dicho lugar se encontraba vacío y que el personal médico no tiene presencia permanente."