Rechaza Pérez Roque la política de "doble rasero"
Obstruye Washington el Consejo de Derechos Humanos: La Habana
Ginebra, 13 de marzo. El canciller cubano, Felipe Pérez Roque, acusó este martes a Estados Unidos de dilatar la aprobación de las reglas del Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para convertirlo en un "tribunal inquisidor" contra los países del tercer mundo.
El funcionario cubano se manifestó en favor de la continuación de los mecanismos temáticos, ante la existencia de centros internacionales de tortura como Guantánamo, vuelos secretos, secuestros y traslado de personas en Europa con el objetivo de ser torturados en cárceles clandestinas.
"El Consejo de Derechos Humanos corre el riesgo de ser sumido en el descrédito de la politización y el doble rasero, incluso antes de que se establezcan sus mecanismos y métodos de trabajo", añadió.
Según el canciller, mediante sus aliados, Estados Unidos busca dilatar la aprobación de las nuevas reglas con la esperanza de que cambie la composición del consejo.
"Aquellos que apoyan con más fuerza este curso de acción son precisamente los mismos interesados en convertir al nuevo órgano en tribunal inquisidor contra los países del sur", indicó.
La nueva elección de los 47 miembros del Consejo de Derechos Humanos de la ONU será en el 2009.
Cuba fue elegida en mayo de 2006 miembro del consejo con los votos de 135 de los 191 países miembros de la Asamblea General de la ONU. Las autoridades comunistas de la isla lo celebraron como una victoria en su guerra ideológica de casi medio siglo contra Estados Unidos.
Washington, acusado de violar los derechos humanos de sospechosos de terrorismo, no se postuló porque, dijo, los cambios del nuevo organismo eran insuficientes.
El canciller Pérez Roque indicó este martes en Ginebra que para definir la metodología de trabajo del Consejo de Derechos Humanos no hace falta más tiempo, sino más voluntad política.
El organismo fue creado en junio de 2006 en sustitución de la desacreditada Comisión de Derechos Humanos, que condenó durante una década y media al gobierno de Cuba por encarcelar y reprimir a sus opositores. Los mecanismos de operación del nuevo Consejo de Derechos Humanos aún no fueron definidos.
Pérez Roque rechazó enfáticamente la imposición de "métodos espurios", como la elección de relatores especiales para países.
Por lo contrario, reiteró su apoyo al sistema de relatores temáticos. "Nunca antes fueron tan necesarios" aquellos como el relator sobre el derecho a la alimentación, la tortura, los derechos humanos de los migrantes, la libertad de opinión y expresión o procedimientos especiales sobre la detención arbitraria, las desapariciones forzadas y las ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias, o el que se ocupa de los derechos del pueblo palestino, afirmó.