Lectura apasionante
La lectura que realiza el maestro Nikolaus Harnoncourt, una de las mayores autoridades en la materia, es una verdadera maravilla. En un álbum triple de la marca Teldec y al frente de la orquesta que fundó en 1953, Concentus musicus Wien, en la que también ejecuta el violonchelo y la viola de gamba, Harnoncourt nos regala además un ensayo formidable en el libro incluido. El doble coro: Regensburger Domchoir y el King's College Choir Cambridge y un puñado de solistas de fantasía: Kurt Equiluz, Nigel Rogers, Kart Ridderbusch, Paul Esswood.
Pero sobre todo se trata de una versión exquisita, profunda, inenarrable. Una manera de describir la eminencia de esta versión es el tempo elegido por Harnoncourt: un fraseo endiablado que lo hace completar la obra entera en un tiempo increíble: dos horas con 54 minutos y 17 segundos, es decir, casi media hora menos que el estándar, por ejemplo Karajan lo hace en tres horas 24 minutos, 22 segundos, mientras que Richter en tres horas 17 minutos. Proeza musical no tanto por el tiempo consumido, sino por la grandeza musical consumada.