A los dos países toca alzar una sola voz, dice Calderón
Propósitos comunes unen a México y Chile: Bachelet
Agradece la mandataria cobijo tras el golpe militar de 1973
Ampliar la imagen Michelle Bachelet, Felipe Calderón, Margarita Zavala y Patricia Espinosa, ayer en Palacio Nacional Foto: Notimex
A su llegada a México, la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, resaltó frente a su homólogo mexicano, Felipe Calderón, que a ambos países los unen propósitos comunes, como erradicar la pobreza y disminuir la brecha de desigualdad que afecta a América Latina y "debilita a las democracias que tanto ha costado construir".
Entre evocaciones a Salvador Allende y a Gabriela Mistral, Calderón destacó que a los dos países toca alzar una voz común y construir un futuro que no es cuestión de derecha ni de izquierda, sino de un alto sentido de responsabilidad social.
Cálida fue la bienvenida que recibió la presidenta chilena en Palacio Nacional, la primera visita de Estado que hace un mandatario durante este sexenio. Acompañados de sus respectivas comitivas, ambos llegaron a las 20:15 horas al patio central, escucharon los himnos de cada país y luego pronunciaron sus mensajes para concluir con el saludo a las banderas de las dos naciones.
En el patio, que fue adornado con 16 banderas de Chile y México, la primera mujer presidenta en Sudamérica comenzó por agradecer la acogida que nuestro país brindó a miles de chilenos tras el golpe militar de septiembre de 1973, "lo que demuestra una vez más que los amigos son amigos en las buenas y en las malas condiciones.
"Por ese gesto, gracias una vez más en nombre del pueblo de Chile", señaló la mandataria, quien vivió su juventud exiliada en Alemania.
La historia personal de Michelle Bachelet refleja la de su país. Hija del fallecido general de brigada aérea Alberto Bachelet y de la arqueóloga Angela Jeria, durante la dictadura pinochetista ella y su familia fueron detenidos y torturados. Militante del Partido Socialista, con el gobierno de Ricardo Lagos fue ministra de Salud y la primera ministra de Defensa de América Latina.
En la ceremonia de recepción, la presidenta recordó a los poetas chilenos Gabriela Mistral y Pablo Neruda, así como a artistas mexicanos, como David Alfaro Siqueiros y Diego Rivera, y señaló que los dos países tienen una mirada común en buscar el fortalecimiento de la democracia, la defensa del estado de derecho, el desarme y la condena al terrorismo.
En cuanto a los resultados del acuerdo de libre comercio México-Chile, vigente desde 1999, señaló que en 1990 el intercambio sumó 158 millones de dólares y en 2006 llegó a 3 mil 237 millones; sin embargo, aseguró que se puede hacer mucho más.
Calderón, quien estaba acompañado de su esposa, Margarita Zavala, resaltó la figura de Bachelet, al señalar que ha tenido la capacidad de transformar la animadversión en solidaridad hacia sus semejantes, y recordó cuando México abrió las puertas a muchos chilenos perseguidos.
En el terreno de las coincidencias, destacó que ambas naciones son "orgullosamente latinoamericanas" democráticas y comparten valores, "como el respeto irrestricto al estado de derecho y la defensa de libertades individuales y los derechos humanos".
De manera que se dijo confiado en que juntos impulsarán una nueva y destacada presencia latinoamericana en el escenario internacional, porque "más allá de divergencias ambos países son amigos y hermanos".
A Calderón lo acompañaron el jefe de la oficina de la Presidencia, Juan Camilo Mouriño, los secretarios de Relaciones Exteriores, Patricia Espinosa; de Economía, Eduardo Sojo; de Medio Ambiente, Juan Elvira Quesada, y de la Función Pública, Germán Martínez; el coordinador de Comunicación Social de la Presidencia, Maximiliano Cortázar, y el presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Sergio Vela.
La comitiva de Bachelet está integrada por los ministros de Relaciones Exteriores, Alejandro Foxley; de Agricultura, Alvaro Rojas, y de Cultura, Paulina Urrutia, así como de un grupo de diputados y senadores.