México, en zona de sismos, erupciones volcánicas, huracanes y otros fenómenos
SG: necesarios, $4 mil millones para reconstrucción ante desastres naturales
De 1981 a la fecha se ha perdido cada año en México un promedio de 500 vidas humanas a consecuencia de desastres naturales, los cuales han dejado -también anualmente- daños materiales por unos 7 mil millones de pesos, revelan documentos de la Secretaría de Gobernación (SG).
Lo anterior, debido a que México se encuentra en una zona geográfica que lo expone a terremotos, erupciones volcánicas, huracanes, sequías e incendios, entre otros fenómenos.
En ese contexto, autoridades de Protección Civil señalaron que es deseable contar con un fondo de por lo menos 4 mil millones de pesos para hacer frente a un proceso de reconstrucción, derivado de desastres naturales, nunca descartados en el país.
En el Presupuesto de Egresos de la Federación para 2007 (provisiones económicas, aprobado por los diputados) fueron autorizados 135.7 millones de pesos al Fondo de Desastres Naturales (Fonden) y 97 millones al Fondo para la Prevención de Desastres Naturales (Fopreden); es decir, 232.7 millones para el área. La petición original del Ejecutivo, por conducto de la Secretaría de Hacienda, fue de 500 y 250 millones, respectivamente.
El fondo para reconstrucción alcanzó en el pasado 7 mil 387 millones de pesos, pero se extinguió al hacer frente a los efectos de los huracanes Emily, Stan y Wilma, que provocaron pérdidas (directas e indirectas) en 2005 de alrededor de 44 mil millones de pesos.
Ante la magnitud de esos desastres (en entidades del sur y el sureste), el gobierno federal destinó a reconstrucción poco más de 19 mil millones de pesos, monto derivado del Fonden (7 mil 387 millones) y de recursos que debieron aportar dependencias oficiales y gobiernos locales, así como una partida especial autorizada por el Congreso de la Unión.
Si hoy ocurriera una catástrofe, Hacienda tendría que intervenir para atender, vía reasignación de recursos, la reconstrucción, toda vez que una partida para este rubro no está asignada directamente en el presupuesto de las dependencias federales.
Cabe precisar que los recursos destinados a la reconstrucción -los cuales se agotaron- tras el paso de los huracanes son distintos del "fondo revolvente" del Fonden, el cual funciona como especie de "caja chica" para atender, principalmente, las necesidades inmediatas de abrigo y alimentación de la población afectada por fenómenos naturales.
El año pasado, por ejemplo, ese fondo revolvente sirvió para atender los daños provocados por lluvias.
"En 2005 tuvimos que romper el cochinito y sacar recursos para atender la contingencia. Para 2007 tendremos que empezar de nuevo con un piso presupuestal", informó Laura Gurza, titular de la Coordinación General de Protección Civil de la SG.
Esa área ha ejercido de 1999 a 2006 poco más de 26 mil millones de pesos, por lo que en un promedio de gasto solicitaron para el próximo año una base presupuestal de por lo menos 3 mil 286 millones.
En las líneas estratégicas para 2007, Protección Civil advierte de la necesidad de avanzar en esta materia ante los efectos de los fenómenos naturales y los de origen "antropogénico", como accidentes, explosiones, derrames y fugas, entre otros.
Entre "los potenciales escenarios realistas de desastre a corto a mediano plazos" podrían mencionarse los causados por un sismo como el de septiembre de 1985, "cuya probabilidad crece día con día", una pandemia por influenza o efectos dramáticos derivados del cambio climático.
Protección Civil refiere que no existe contundencia para enfrentar los fenómenos y mitigar sus consecuencias.
Hace falta, por ejemplo, un centro nacional de operación de emergencias ("sala de crisis insterinstitucional"), incluida la comunicación en vivo con instancias locales; adquirir un seguro de cobertura contra daños por desastres, e invertir en proyectos preventivos, así como un sistema de profesionalización de carrera en protección civil.