Sigue la destrucción de propaganda, dicen candidatos
Priístas y panistas de Yucatán se acusan hasta de usar hechicería
Ampliar la imagen Habitantes de Acanech borran propaganda del candidato panista a la alcaldía, Fernando Achach Castro, quien dijo que existe una campaña de sabotaje del PRI Foto: La Jornada
Mérida, Yuc., 25 de marzo. Según diversos actores políticos, en las campañas electorales todo se vale, y en Yucatán -donde el 20 de mayo se celebrarán comicios que renovarán gubernatura, ayuntamientos y Congreso local- algunos candidatos han recurrido a artimañas que van desde la destrucción de propaganda ajena hasta presuntos actos de brujería con tal de intimidar a sus oponentes.
En el municipio rural de Oxkutzcab, en el sur del estado, el candidato del PRI a la alcaldía, Juan José Martín Briceño, denunció que fue víctima de un supuesto hechizo: descubrió que familiares de su adversario panista, Freddy Domínguez Aké, le echaron sal a las puertas de uno de sus ''cuarteles de campaña''.
Según vecinos que observaron los hechos, como consta en la denuncia que se interpuso ante el Ministerio Público, Lorena Avila, suegra del aspirante del blanquiazul a la presidencia municipal, acompañada de varias personas, esparció sal a las puertas de un salón de fiestas donde se realizaba una comparsa de artistas aficionados y simpatizantes del abanderado priísta.
Habitantes de Oxkutzcab consideraron este acto como ''brujería'', lo que despertó polémica e inclusive temor. Los vecinos manifestaron que la suegra del panista es aficionada a la hechicería.
En Oxkutzcab se informó que se contrataron los servicios de un X'men (brujo en lengua maya) para contrarrestar el acto de la familiar de Domínguez Aké.
Este hecho parece tener antecedentes. Hace algunas semanas la militante panista Juana Barbosa Mena rezó ante la imagen de un Cristo y dispersó sal para que su correligionario Freddy Domínguez fracasara en urnas.
En contraste, el candidato panista a diputado por el distrito 14, Fernando Achach Castro, interpuso una demanda penal contra un grupo de sujetos que, frente a él, destrozaron y borraron su propaganda en la comunidad Ticopó, pequeño poblado del municipio de Acanceh.
Achach Castro documentó su demanda con fotografías en las cuales se observa a varios jóvenes que borran su propaganda.
Interrogados por el panista, los sujetos dijeron tener ''órdenes superiores de obstaculizar actos y propaganda provenientes del PAN'', lo que fue interpretado por Fernando Achach como una campaña de sabotaje vinculada a grupos priístas.