PRD, PT y Convergencia toman la tribuna
El PRIAN impide debate sobre el caso Zongolica
Pedían comparecencia de titulares de Sedena y CNDH
Ampliar la imagen Diputadas perredistas, petistas y de Convergencia, durante la toma de la tribuna de San Lázaro para exigir que se debatiera el caso de la anciana muerta en Zongolica Foto: José Antonio López
El PAN y el PRI en la Cámara de Diputados mantienen una relación inextinguible, y en conjunto ayer rechazaron la posibilidad de debatir en el pleno de sesiones las causas que provocaron la muerte de la indígena Ernestina Ascencio Rosario. Ambos partidos, sobre todo sus legisladoras, argumentaron que no debatirían el tema de la violación tumultuaria a la anciana, porque PRD, PT y Convergencia ofendían al Ejército Mexicano.
El desarrollo de la sesión ordinaria, previa a las vacaciones de Semana Santa, transcurrió entre bostezos. Después de una larga lista de puntos de acuerdo que fueron turnados a las comisiones respectivas para análisis, paradójicamente se aprobó una solicitud al Instituto Nacional de las Mujeres para que elabore los programas integral para prevenir, atender, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres, y el nacional para la igualdad entre géneros.
La reacción de la mayoría integrada por PAN y PRI fue distinta a esa votación cuando las diputadas del PRD -Maricela Contreras, Valentina Batres, Alliet Bautista, Mónica Fernández y Adriana Díaz- y la petista Mercedes Maciel, presentaron una solicitud para que el presidente de la Cámara, Jorge Zermeño, modificará el orden del día y se inscribiera el debate acerca de la violencia proveniente del Ejército contra mujeres en el país.
En ese momento panistas y priístas formaron un bloque insalvable hasta el final de la sesión, que fue levantada por no existir condiciones para que continuara.
Jorge Zermeño se sumó a la postura de las diputadas del PRD; no obstante, por reglamento éste debía consultar al pleno si aceptaba modificar el orden del día. En medio de protestas, todas las legisladoras de PRD, PT y Convergencia ocuparon la tribuna portando cartulinas que denostaban a Felipe Calderón y a José Luis Soberanes, titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH): "Calderón, ya estás contento con las acciones de tu pelotón; Soberanes, ¿a quién estas protegiendo?; Soberanes, no emitas opiniones por consigna; Soberanes, no encubras a violadores; Calderón, no es de hombres defender a violadores".
Zermeño intentó dar cauce a la inconformidad de las perredistas y las convenció de que era necesaria la votación, porque él no estaba facultado para modificar de un plumazo el orden del día. Las legisladoras del sol azteca aceptaron con disgusto, pero al comenzar el conteo de votos y percatarse de que PRI y PAN no permitirían el debate, regresaron a la tribuna para instalarse frente al micrófono que ocupan los oradores.
Mientras los legisladores de PRI y PAN obedecían la consigna de votar en contra, y así se manifestaba en los tableros electrónicos de San Lázaro, una docenas de perredistas argumentaron en favor de la necesidad de debatir sobre la violencia contra las mujeres, en especial la muerte de la anciana Ernestina Ascencio.
Al agotarse los 10 minutos de la votación, se consumó el mayoriteo de PAN y PRI y, con impotencia, las mujeres perredistas, petistas y de Convergencia reclamaron a gritos: "¡Debate, debate, debate!, ¡justicia, justicia, justicia!"
Manifestando indignación y enojo, Maricela Contreras, acompañada por varias correligionarias, se dirigió a la curul de Emilio Gamboa para intentar convencerlo de que los priístas cambiaran el sentido de su voto. Ningún argumento sirvió para que el líder del priísmo en San Lázaro cediera, mientras a unos metros el coordinador del perredismo, Javier González Garza, atestiguaba el mayoriteo de panistas y tricolores.
La indignación que se percibía en el salón se manifestó cuando las diputadas inconformes por el rechazo al debate se mantuvieron en tribuna e impidieron que continuara la sesión. Zermeño se vio obligado a levantarla por no existir condiciones para continuar el proceso legislativo. A las perredistas se sumaron la panista María Elena Alvarez, los priístas Carlos Rojas, Sara Latife, Fernando Moctezuma, Pedro Montalvo y Alfredo Ríos Camarena, pero su respaldo no alcanzó y el debate del punto de acuerdo se dejó para otro momento.
El punto de acuerdo en cuestión insta a la Secretaría de Gobernación que declare la alerta por violencia de género en la zona de Zongoliga, Veracruz; solicita la comparecencia ante comisiones unidas de Equidad y Género, Justicia y Derechos Humanos del secretario de la Defensa Nacional, Guillermo Galván, y del presidente de la CNDH, con el propósito de que informen sobre las pesquisas relacionadas con el deceso de Ernestina Ascencio, y plantea integrar un grupo plural de legisladores que investigue las vejaciones cometidas por elementos de las fuerzas armadas contra mujeres.