Crear un manual de detenciones, piden a policía queretana
Querétaro, Qro., 4 de abril. A un año del deceso de Genaro Arres Rascón, torturado por agentes de la Policía Investigadora Ministerial (PIM), la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) emitió una recomendación al titular de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), Juan Martín Granados Torres, por violaciones a los derechos humanos en agravio del acusado de robo.
En marzo de 2006 Genaro Arres, de 29 años, era investigado por denuncias de robo calificado a una empresa de traslado de valores en la que laboraba. Fue llevado a la agencia del Ministerio Público número 3 en esta capital, para que ampliara su declaración.
En el interrogatorio Genaro Arres fue golpeado y al parecer le metieron la cabeza en la taza de un retrete. Según la necropsia, su cuerpo presentaba ''características visibles de congestión en varios órganos y tejidos que evidencian muerte por asfixia''; además, tenía ''huellas como equimosis (moretones) en labio superior y región parietal izquierda''.
Asimismo, la CEDH acreditó una ''conducta indebida'' de los agentes de la PIM Francisco Javier Jaramillo Morales y Víctor Manuel Urbieta Morales, por lo que fueron recluidos en el Centro de Readaptación Social de San José El Alto, acusados de homicidio.
El organismo defensor de los derechos humanos solicitó a la corporación que encabeza Juan Martín Granados Torres elaborar un instructivo-manual sobre la actuación de los servidores públicos.
También solicitó aplicar un programa de capacitación para los servidores públicos adscritos a la PGJE, sobre los lineamientos y procedimiento del manual. La coorporación tiene 15 días hábiles para responder si acepta o rechaza la mencionada recomendación.
Tras el deceso de Genaro Arres y la acusación de los dos agentes ministeriales, medios locales públicaron cartas firmadas por ''PIM'', donde presuntos agentes lamentaron que se acusara a sus compañeros cuando ellos sólo obedecían órdenes, y aseguraron que el acusado fue golpeado para que indicara dónde estaba el dinero presuntamente robado.