Causa diarrea, dolor abdominal, náuseas y fiebre, entre otros problemas
Detectan carne contaminada con Arcobacter butzieri en Guadalajara
Un equipo de científicos de la UdeG, encabezado por María del Refugio Torres Vitela, descubrió el patógeno en más de 35 por ciento de las muestras recolectadas en la capital tapatía
Un patógeno llamado Arcobacter butzieri, aislado por primera vez en 1992 por un grupo de investigadores en Estados Unidos, y que ha causado la infección en carnes de cerdo, res y pollo en el vecino país y en naciones de la Unión Europea, fue localizado por primera ocasión en México, particularmente en Guadalajara.
Un grupo de investigadores del Departamento de Fármaco Biología de la Universidad de Guadalajara (UdeG), encabezado por María del Refugio Torres Vitela, informó que dicho patógeno se encuentra ya en más de 35 por ciento de las muestras recolectadas en carnicerías de la zona metropolitana de la capital de Jalisco.
Este patógeno provoca diarrea persistente, dolor abdominal, náuseas, fiebre, gastroenteritis, casos de bacteriernia, cirrosis hepática y neumonía hematogenosa. Otra característica es que no produce la toxina distensora citoletal, o CDT por sus siglas en inglés; presenta características de invasividad y adherencia. En los animales, particularmente los bovinos, puede, inclusive, llegar a provocar el aborto y mastitis.
El grupo de investigadores de la UdeG descubrió, además, una característica desconocida de dicho patógeno: presenta toxinas vacuolizantes, es decir, que producen la formación de grandes vacuolas en las células eucarióticas.
La bacteria resulta más tolerante que otras de la familia Campylobacter al oxígeno y a la temperatura de refrigeración, pero resulta sensible al cloro y a los ácidos cítrico y láctico; al citrato de sodio y al lactato de sodio. Otros patógenos microbianos transmitidos por alimentos, y emergidos recientemente, además del Arcobacter, son Cryptosporidium, Cyclospora cayetanensis, Campylobacter jejuni, Escherichia coli 0157:h7, Listeria monocytogenes, Salmonella typhimurium DT 104, Salmonella enteritidis PT 4, Vibrio vulnificus y Versinia enterocolítica.
Torres Vitela señaló que el patógeno ya tiene una "fuerte presencia" en los cortes de carne que consumen las familias de Guadalajara. "De las muestras que hemos recogido de las carnicerías en diferentes zonas del área metropolitana, encontramos una frecuencia de más de 35 por ciento de carnes de pollo, cerdo y res ya infectadas", añadió.
Sobre el patógeno, que se ha encontrado por primera vez en México y probablemente en América Latina, la investigadora urgió a las autoridades a vigilar más estrechamente los sitios donde los animales son sacrificados, además de revisar las condiciones en que se encuentran los animales para consumo humano.
"En Estados Unidos y en Europa hay ya personas infectadas por el consumo de carne contaminada con este patógeno", añadió.
"Ni en México ni en el resto de América Latina se había sabido nada respecto de esta bacteria, porque hasta el momento no había sido localizada. Por eso, no sabemos aún hasta qué punto la bacteria esté provocando trastornos en las poblaciones de nuestras ciudades. Somos el primer grupo de investigadores en el país y en la región latinoamericana, que reportamos la presencia de este patógeno. Lo hemos encontrado en una alta frecuencia en productos de venta directa al público. Las personas deben tener mucho cuidado con el manejo de la carne cruda, porque también puede contaminar otros productos. Y también recomendamos que la carne sea bien cocida para evitar su transmisión".
María del Refugio Torres Vitela es licenciada químico-farmacobióloga por la Facultad de Ciencias Químicas de la UdeG. Su especialidad es la microbiología sanitaria, y cuenta con una maestría en microbiología e higiene de los alimentos y el doctorado en ciencias de la salud, ambos posgrados también en la UdeG. Actualmente funge como profesora investigadora de tiempo completo titular "C" en el Laboratorio de Microbiología Sanitaria, vigente desde 1983 a la fecha, además de pertenecer al padrón de excelencia del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología de 1998 a la fecha, y al Sistema nacional de Investigadores nivel II.