Preocupa al organismo la creciente dependencia del país sobre los ingresos petroleros
México debe reducir exenciones que benefician a pocos: FMI
Se deberán tomar ''decisiones políticas difíciles'', destacó
El fondo confía en que la discusión de reformas estructurales sea tan rápida como la reforma al sistema de pensiones del ISSSTE
Ampliar la imagen
El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Ben Bernanke, ofreció una conferencia en la Escuela de Leyes de la Universidad de Nueva York, que formó parte de una reunión sobre la política económica global. El funcionario afirmó que la regulación de los fondos de cobertura ha funcionado bien hasta ahora, pero si estos fondos no toman riesgos, sus beneficios sociales podrían desaparecer
Foto: Ap
Washington, DC, 11 de abril. A unos días del comienzo de la discusión sobre la reforma fiscal, el Fondo Monetario Internacional (FMI) planteó que el sistema tributario mexicano debe reducir las ''exenciones'' que ''benefician a unos cuantos'' contribuyentes. ''Decisiones políticas difíciles deben ser tomadas'', añadió el organismo al abundar sobre el tema, a la vez que hizo explícita su ''preocupación'' por la creciente dependencia de los ingresos petroleros.
El FMI externó ''confianza'' en que la rapidez con que fue aprobada en México la reforma al sistema de pensiones de los trabajadores del Estado, un debate de apenas unas semanas, se reproduzca en la discusión de otras propuestas de ''reforma estructural''.
''Ciertamente sabemos que el consenso en materia de reforma fiscal es algo difícil de alcanzar'', dijo en una entrevista Charles Collyns, subdirector de investigaciones del FMI y coautor del informe semestral Perspectivas de la economía mundial (WEO, por sus siglas en inglés), divulgado hoy aquí por el organismo.
La próxima semana está previsto que en México se formalice el comienzo de negociaciones entre el Ejecutivo y el Congreso -que también incluirá a otros agentes económicos y sociales- sobre la reforma al sistema tributario. La discusión tendrá como telón de fondo la reciente divulgación de un informe de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), el órgano de fiscalización de la Cámara de Diputados, que puso al descubierto la forma en que el sistema fiscal mexicano permite a los grandes contribuyentes no pagar impuestos, o enterar cantidades irrisorias.
Con una recaudación menor a 15 por ciento del producto interno bruto (PIB), México tiene uno de los regímenes fiscales más débiles de entre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos.
-Desde el punto de vista fiscal, ¿cómo se observa la situación de México?, se le preguntó a Collyns.
-El presupuesto que fue recientemente entregado al Congreso por el gobierno federal cumple en general con un programa realizable. En lo general es bueno, está bien diseñado y es alcanzable el equilibrio fiscal. Sin embargo, estamos preocupados en un aspecto importante del presupuesto, que es el continuo incremento del déficit fiscal no petrolero (es decir, sin los ingresos del petróleo).
Charles Collyns dijo que si en el presupuesto federal mexicano no se incluyen los ingresos obtenidos de la exportación de petróleo crudo, las finanzas públicas tendrían un déficit de 8 por ciento del PIB, unos 720 mil millones de pesos a precios actuales.
''La producción de petróleo de México está declinando, no subiendo, y el ingreso petrolero en el total de los ingresos fiscales es muy alto (36 por ciento), lo que mantiene muy vulnerables las finanzas públicas, y hace necesario que el gobierno busque otras fuentes de recursos no petroleras, particularmente tributarias, que den solidez al financiamiento del gasto público'', añadió el funcionario del FMI.
''Ampliar la base de recaudación fiscal es uno de los cambios estructurales que sabemos que ya está tratando de alcanzar México, no sólo el gobierno, sino los principales actores políticos, porque de ello depende la sustentabilidad del crecimiento económico'', agregó.
Desempeño menor al de la economía de AL
En el WEO, publicación semestral en la que el FMI plantea sus pronósticos sobre el comportamiento de la economía mundial, el tema tributario ocupa una mención especial respecto de México.
En el documento se señala, en primer lugar, que el crecimiento del PIB en México para 2007 será de 3.4 por ciento, una caída de 1.4 puntos respecto del observado en 2006. Se trata de un desempeño por abajo del esperado para América Latina en conjunto, que es de 4.9 por ciento, a la vez menor al 5.5 por ciento registrado el año pasado.
Hay dos razones principales del menor desempeño esperado para la economía mexicana. Primero, la desaceleración de la actividad en Estados Unidos (se espera una tasa anual de 2.2 por ciento, 1.1 puntos menos que en 2006) y un menor precio del petróleo.
''Los países latinoamericanos que tienen una particular relación estrecha con Estados Unidos, como México, Centroamérica y el Caribe, o que son exportadores importantes de petróleo y metales, serán los más afectados'' por el actual ciclo económico, indicó el WEO.
Dice que para mantener la fase de crecimiento de los últimos tres años, se deben reforzar las reformas instrumentadas hasta ahora, con el fin de mejorar, asegura, la distribución del ingreso ''que es esencial no sólo desde una perspectiva social sino también necesaria para asegurar un apoyo amplio al proceso de reformas''.
Así, plantea que los siguientes meses serán de ''retos y decisiones políticas difíciles que necesitan ser tomadas''. En particular, la caída en los precios de materias primas (como el petróleo) puede imprimir presión a las cuentas fiscales y hacer más difícil aumentar el gasto social. En este entorno, advierte, cobra más relevancia la necesidad de poner en práctica reformas fiscales.
''En particular para países con un bajo nivel de ingreso respecto al PIB o con dependencia de las exportaciones de materias primas, como México, Perú y Venezuela, son necesarios esfuerzos para ampliar la base gravable, reducir las exenciones fiscales para unos cuantos y mejorar la administración fiscal'', indicó el WEO.
El presidente del Banco Mundial, Pa elogió la designación del secretario mexicano de Hacienda, Agustín Carstens Carstens, como presidente del Comité de Desarrollo, el organismo encargado de asesorar a las juntas directivas del Banco Mundial y el FMI.
Wolfowitz, ''encantado'' con Carstens
México es un "socio ideal" para el Banco Mundial, comentó este miércoles Paul Wolfowitz, presidente de ese organismo internacional. El funcionario destacó la reforma al sistema de pensiones de los trabajadores del Estado, promulgada hace un par de semanas después de un paso rápido por el Congreso, y dijo que ese tipo de cambios "son vistos con interés" por la institución.
Wolfowitz hizo esas declaraciones a la prensa, en el marco de una semana de trabajos de la reunión anual de primavera del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional.
''Tengo que decir que, personalmente, estoy encantado con la designación del señor Carstens como presidente del Comité de Desarrollo. Este hombre tiene una experiencia extraordinaria con las instituciones de Bretton Woods y es ahora ministro (secretario) de Hacienda de uno de los más importantes países de ingreso medio'', añadió