La GAM envía agentes y grúas para despejar varias calles
Comienza reordenamiento del tianguis de San Felipe de Jesús
Ante la posibilidad de que el gobierno del Distrito Federal aplique un operativo similar al de Tepito o La Ford, en Iztapalapa, comerciantes del tianguis de la colonia San Felipe de Jesús han comenzado a preparar sus facturas y documentos con el propósito de acreditar la legalidad de sus productos.
Asimismo, han exigido a los vendedores de autopartes usadas, a quienes señalan como los probables expendedores de mercancía de de "dudosa procedencia", a cambiar de giro o vender piezas automotrices nuevas.
La delegación Gustavo A. Madero, con el apoyo de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina, desplegó la mañana de ayer más de cien policías y 15 grúas para despejar las avenidas Gran Canal, León de los Aldama, Villa de Ayala y Ejido, que sirven de estacionamiento a decenas de conductores que compran en ese lugar.
Según autoridades delegacionales lo anterior es el primer paso para el "reordenamiento" del tianguis, el cual se realizó en acuerdo con los vendedores del lugar, por lo que agregó que de continuar "la buena comunicación" con ellos, en 45 días comenzaría formalmente el proceso.
Las autoridades delegacionales estudian reducir de 10 a 30 centímetros cada uno de los 30 mil puestos que se instalan en la zona, lo que permitiría ampliar los espacios destinados a peatones y servicios de emergencia.
La semana pasada el jefe de la policía del DF, Joel Ortega Cuevas, dejó entrever que este mercado podría ser objeto de una acción policiaca para inhibir la comercialización de diversos productos de origen ilícito, como se especula hace varios años.
Varios comerciantes del lugar aseguraron que la mayoría trabaja legalmente, por lo que consideraron injusto que por unos pocos se afecte la imagen de todos los vendedores.
"Hay inquietud entre nosotros, por la mala imagen que han difundido los medios de comunicación... esta es nuestra fuente de trabajo, es el sostén de nuestra familias", comentó Rodolfo Soria, quien junto con algunos integrantes de su familia, vende aparatos electrónicos nuevos y seminuevos, además de chácharas.
Un vendedor de autopartes y refacciones con facturas y notas de remisión con fechas que van desde 1990 hasta 2003, aseguró que toda su mercancía, la cual exhibe en el suelo, es de procedencia legal. "Nosotros le compramos al gobierno de Puebla, a los corralones y aseguradoras", aunque reconoció que en algunos casos no cuenta con la documentación que acredite la propiedad de las piezas.
El mercado de la San Felipe de Jesús, es considerado uno de los más grandes de América Latina, y lleva más de 40 años instalándose cada domingo a lo largo de la calle Villa de Ayala y otras aledañas.