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En Iximche´, Guatemala Tercera Cumbre Continental de Pueblos y Nacionalidades Indígenas Los pueblos y nacionalidades indígenas de América, reunidos en la Tercera Cumbre del Abya Yala realizado en Iximche', Guatemala, ratificaron el 30 de marzo las declaraciones de Teotihuacan (México, 2000) y Kito (Ecuador, 2004), los principios milenarios de complementariedad, reciprocidad y dualidad, y la lucha por el derecho al territorio, la Madre Naturaleza, autonomía y libre determinación de los pueblos, "para hacer del Abya Yala una tierra llena de vida".
"Siglos de colonización, y hoy la imposición de políticas neoliberales que continúan el saqueo de nuestros territorios, apoderándose de los espacios y medios de vida de los pueblos indígenas, causan degradación de la naturaleza, pobreza y migración por la sistemática intervención en la soberanía de los pueblos de las transnacionales en complicidad con los gobiernos", expresa el documento final de la cumbre.
Las organizaciones participantes se comprometieron a afianzar alianzas entre los pueblos indígenas y de éstos con los movimientos sociales del continente y el mundo "que permitan enfrentar las políticas neoliberales y todas las formas de opresión". Responsabilizaron a los gobiernos por el permanente despojo de los territorios y la extinción de los pueblos indígenas del continente, a partir de las prácticas de genocidas de las transnacionales, y "la poca voluntad de las Naciones Unidas en viabilizar la Declaración de los Derechos de los Pueblos Indígenas" sin garantizar el cumplimiento de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Ratificaron su derecho ancestral e histórico al territorio y los bienes comunes, y "su carácter inalienable, imprescriptible, inembargable e irrenunciable, aún a costa de nuestras vidas". Llamaron a fortalecer la refundación de los Estados-nación y la construcción de Estados plurinacionales y sociedades interculturales a través de Asambleas Constituyentes con representación directa de los pueblos y nacionalidades indígenas. También a profundizar "el ejercicio de la autonomía y libre determinación, aún sin el reconocimiento legal de los Estados-nación". La declaración rechaza los tratados de libre comercio y reafirma la defensa de la soberanía alimentaría y la lucha contra los transgénicos. Se acordó exigir a las instituciones financieras internacionales y los gobiernos la cancelación de las concesiones (mineras, petroleras, forestales, gasíferas y de agua) en territorio indígenas; condenar las políticas de Estados Unidos "expresadas en la exclusión demostrada con el muro en la frontera con México", mientras trata de apropiarse de los bienes comunes de los pueblos. La condena se extiende a "las democracias impostoras y terroristas", que se traducen en militarización de los territorios indígenas y criminalización de luchas y movimientos sociales. Para ello, las organizaciones participantes se constituyeron en la Coordinadora Continental de las Nacionalidades y Pueblos Indígenas del Abya Yala, "como espacio permanente de enlace e intercambio, donde converjan experiencias y propuestas", para enfrentar la globalización "y luchar por la liberación definitiva de nuestros pueblos hermanos, la madre tierra, el territorio, el agua y todo el patrimonio natural para vivir bien". |
