La STPS se alejará de cualquier tentación en el manejo de registros gremiales

Se indagará hasta donde tope el caso Pasta de Conchos, afirma Lozano

Los mineros deben decidir si es ético que su sindicato sea manejado a distancia

ANDREA BECERRIL

El titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), Javier Lozano Alarcón, dijo ayer a senadores que, "sin enmendar la plana a nadie ni juzgar el pasado", se alejará de cualquier tentación arbitraria o autoritaria en el manejo de los registros de sindicatos y dirigentes, y prueba de ello es que acató de inmediato la decisión judicial por la que se restituyó a Napoleón Gómez Urrutia como dirigente del sindicato minero.

Serán los trabajadores y el propio Gómez Urrutia, aclaró, los que deben resolver "si es ético, moral, práctico o pertinente que el sindicato sea manejado a distancia, o si bien activan los procedimientos para el caso de ausencias temporales".

En reunión con los senadores de la Comisión de Trabajo y Previsión Social, Lozano señaló que aunque en Coahuila el caso Pasta de Conchos parece "totalmente cerrado", en el ámbito federal el compromiso es seguir la investigación "tope donde tope", hasta saber qué fue lo que pasó, qué provocó el fatal accidente, y proceder en consecuencia

En su intervención inicial se adelantó a los cuestionamientos de los legisladores. Reconoció que los delegados y demás autoridades de la STPS encargados de la inspección federal en Pasta de Conchos actuaron con "retraso notable", y será la Secretaría de la Función Pública (SFP) la que determine las responsabilidades administrativas y la Procuraduría General de la República (PGR) las de carácter penal.

El funcionario recibió ayer pocos cuestionamientos. Hasta el perredista Graco Ramírez le reconoció no haber repetido el error de Vicente Fox, quien decidió intervenir en la vida interna del sindicato mineros, al haber impuesto como dirigente a Elías Morales.

Lozano no quiso calificar la actuación de Fox, como se lo pidió el perredista, pero dejó en claro que durante su gestión no se utilizarán las tomas de nota con fines políticos y menos partidistas. Incluso, agregó, la enseñanza del conflicto minero es que "deberemos ser especialmente cuidadosos en la revisión de los documentos de los expedientes y, sobre todo, alejarnos de cualquier tentación arbitraria y mucho menos autoritaria" en lo que se refiere al registro de asociaciones.

Los senadores de todas las fuerzas políticas escucharon al titular de la STPS ir desglosando los cuestionamientos por el caso Napoleón Gómez Urrutia.

Acerca de los señalamientos sobre la rapidez con que acató la resolución del tribunal colegiado, señaló que se trata de un fallo inapelable e inacatable, que debía cumplirse en un término de 24 horas. "Pues claro que la secretaría actuó con rapidez, ¡si no me corren!"

Aclaró que el fallo es independiente de los procesos penales contra Gómez Urrutia y la demanda contra Morales por falsificación de documentos.

Señaló que la decisión del tribunal fue correcta, al sostener que el conflicto lo debió resolver la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, no la Dirección General de Registro de Asociaciones de la STPS.

Lozano Alarcón rechazó que la dependencia interfiera en la vida sindical con el procedimiento de depuración de padrones sindicales que ha puesto en marcha y que provocó que el sindicato minero se amparara, con el argumento de que la secretaría no tiene facultades para ello.

Sin embargo, dijo, después del proceso encontraron que el sindicato minero, que tenía registradas entre 235 y 240 secciones y más de 60 mil afiliados, en realidad cuenta con 74 secciones y 31 mil trabajadores, aproximadamente. Y a escala nacional, de 2 mil 375 sindicatos registrados, hay mil 161 y los demás son membretes.

Acerca del caso Pasta de Conchos, indicó que aunque en el ámbito local el caso está prácticamente cerrado -los cinco casos consignados en Coahuila fueron sobreseídos-, en el federal el compromiso es seguir "tope donde tope" para saber lo que pasó.

Informó que la STPS mandó elaborar un informe oficial sobre la posibilidad de continuar con el rescate de los cuerpos de los 63 mineros atrapados en Pasta de Conchos, ya que no confía en el que encargó la empresa a un perito estadunidense.

Acerca de la responsabilidad de los delegados federales de la STPS, dijo que "si bien es cierto que el ciclo de inspección federal se completó, incluso antes del accidente, también lo es que se hizo con retraso notable, tanto entre el proceso de dictaminar y emplazar a la empresa a corregir fallas, como en el de regresar y verificar si se había cumplido o no con el emplazamiento".

El expediente "completito" sobre el caso lo tiene ya la SFP, que deberá fincar responsabilidades administrativas. Y en cuanto a lo que se refiere al ámbito penal, la Procuraduría General de Justicia de Coahuila envió el expediente a la PGR.