El CT advierte que no aceptará gravámenes a prestaciones
El sindicalismo corporativo, aglutinado en el Congreso del Trabajo (CT), manifestó ayer su rechazo a la pretensión gubernamental de gravar las prestaciones de los trabajadores mediante una reforma a la Ley del Impuesto sobre la Renta.
Por su parte, Víctor Flores, líder del sindicato de ferrocarrileros, reviró a la pregunta en torno al regreso de Napoleón Gómez Urrutia, su eterno contrincante, a las lides del gremio minero.
Flores, quien la emprendió contra Gómez Urrutia, advirtió que no le teme a nada ni a nadie: "¡Soy bastante hombre! ¡Bastante!... Un líder que sabe afrontar las cosas. Temor, a nadie le he tenido. Ellos -los mineros y Gómez Urrutia- tomaron una vez el Congreso del Trabajo. No me duraron ni 24 horas; los reto nuevamente cuando ellos digan. No quiero el mal para nadie, pero el que mete la pata la tiene que sacar limpia".
Al preguntarle si Gómez Urrutia deberá responder a la acción de la justicia penal, el representante ferrocarrilero respondió: "Será la justicia la que dictamine. Enhorabuena si regresa, pero hay que responderle a los trabajadores".
Al comentar la probabilidad de que la reforma fiscal afecte las prestaciones de los trabajadores, Enrique Aguilar Borrego, presidente del CT, externó su rechazó:
"Nuestra posición es en contra completamente; ya ha habido varias ocasiones en que el gobierno ha querido modificar la Ley del Impuestos sobre la Renta y gravar las prestaciones. Eso va en contra de los trabajadores, porque se vuelve a intentar cobrarle al que está cautivo. Hay que cobrar a los empresarios que evaden, a los trabajadores informales, hay que cobrar a todos aquellos que no pagan impuesto".
Según Aguilar Borrego, gravar las prestaciones tendría un efecto doble en contra de la economía de los trabajadores:
"Uno: va en contra directamente del nivel de vida de los trabajadores; las prestaciones les sirven para tener un mejor nivel de vida, tienen que ver con las vacaciones, con el aguinaldo.
"Y dos: tiene que ver con la vida sindical, porque si gravan las prestaciones, los contratos colectivos ya no tendrán mucho caso y ¿qué vamos a vender?"