Reconocen la herencia del fundador Oscar Liera
Comienza celebración del 25 aniversario del Tatuas
Culiacan, Sinaloa, 21 de abril. Fundado por el dramaturgo, poeta y director de teatro Oscar Liera (1946-1990), considerado uno de los creadores escénicos más importantes del país de la segunda mitad del siglo XX, el Taller de Teatro de la Universidad Autónoma de Sinaloa (Tatuas), celebra sus 25 años de trayectoria, agrupación que en la actualidad es referente obligado en la cultura estatal y en el ámbito teatral mexicano.
Liera es reconocido por sus obras en las que hace uso del humor y la crítica despiadada contra la Iglesia y el Estado, por sus novedosas estructuras dramatúrgicas, pero sobre todo por el profundo cariño que le tenía a su tierra y a su gente, por quienes rechazó un futuro promisorio en la ciudad de México.
Luego de haber bregado en su ciudad natal en diversos grupos de teatro, estudió en el INBA, posteriormente viajó a Francia e Italia, cursó la carrera de letras hispánicas en la UNAM, al tiempo que participaba en actividades teatrales en Culiacán.
En ese constante ir y venir, uno de sus méritos fue amalgamar los grupos teatrales universitarios de Culiacán, creando así, en 1982, el Tatuas, en la época "del ascenso de los neoliberales y tecnócratas del poder, encabezados por Miguel de la Madrid Hurtado, mientras que en Sinaloa, Antonio Toledo Corro como gobernador encabezaba uno de los gobiernos más conservadores y violentos que haya conocido el estado".
Para el investigador Armando Partida Tayzan, Liera fue "un guerrillero de la cultura que dejó halagos y atractivos en la capital, para crear aquí lo mejor de su dramaturgia, retomando lo más destacado de las tradiciones locales, su esencia y peculiaridades, para luego interpretarlas con una visión universal".
El Tatuas y Liera generaron uno de los movimientos más importantes del teatro regional: las muestras del noroeste, que se constituyeron en una tradición para los grupos de Baja California, Baja California Sur, Nayarit, Sonora y Sinaloa. De esos encuentros surgirían dramaturgos y escritores como Cutberto López, Angel Norzagaray, Edward Coward, Ignacio de la Lama, Fernando Rodríguez, entre otros creadores "quienes dieron de qué hablar por su talento en momentos posteriores", apuntó Rodolfo Arriaga, mejor conocido por su amigos y compañeros como Fito, actual director de la compañía.
Liera dejó escritas 36 obras de teatro. Con El jinete de la divina providencia, el Tatuas marcaría el despegue del teatro sinaloense, obra con la que comenzaron las actividades para celebrar su primer cuarto de siglo, la noche de este viernes en el Teatro del IMSS Oscar Liera. En esos 25 años la agrupación a realizado 2 mil 600 representaciones. Habría que mencionar que en 1983 ya había llamado la atención de los especialistas cuando presentaron en la Muestra Nacional de Teatro La verdad sospechosa, con la dirección de Liera.
El Tatuas se encuentra en su tercera etapa de desarrollo. La primera abarca desde su fundación, hasta el fallecimiento de Liera. La segunda, de 1990 a 1996, la búsqueda e intercambio con otros creadores que enriquecen el acervo del grupo, y una tercera con el comodato del teatro del IMSS, cuyo proyecto se ha denominado Un público se prepara, etapas estas dos últimas encabezadas por Rodolfo Arriaga y de las que hablaron el sábado en mesa redonda Cutberto López, Armando Partida, Francisco Beberido y Jorge Ferro.
"Antes nuestro trabajo escénico se hacía porque vivíamos en una ciudad violenta. Ahora, seguimos con el mismo espíritu, porque es una ciudad violentada", comentó Fito.
"Nosotros somos un estado que por ejemplo, en la época en que Oscar escribió El jinete... y El camino rojo a Sabaiba, fue un periodo en el que -con Toledo Corro como gobernador- hubo seis mil asesinatos. Ahora, cuando digo que es una ciudad violentada, no es que la gente sea violenta, sino que hay una violencia en el ambiente que es generada por otros, igual que la corrupción y la impunidad, lo cual se ha extendido por todo el país.
"A nosotros nos interesa, mediante el teatro, decir esas cosas que pasan y a lo que la gente se ha acostumbrado. En Culiacán en lo que va del año, en promedio hay de 50 a 55 asesinatos cada mes. Van cerca de 400. No se pueden cerrar los ojos, pero la gente no puede pensar que esa sea la realidad que uno tiene que vivir, es decir, como decía Brecht, no veas lo habitual como algo natural. Entonces, la función de nosotros es como un espejo de vida. Nos interesa mostrar que las cosas no han cambiado, sino que se han agravado. Hemos apostado también -con el proyecto Un público se prepara- por un teatro dirigido a los niños y jóvenes, para inculcar una serie de valores, para contribuir a la creación del alma colectiva, que creemos es lo que se ha perdido en estos tiempos. Sin olvidar la vigencia de las obras de Oscar Liera.
"Ahora en lo que estamos trabajando en la universidad es en la creación de un centro de formación actoral profesional. Estamos viendo la posibilidad de crear una licenciatura en teatro. Creemos que esta es la siguiente etapa que sigue para el Tatuas, el cual sin el trabajo de Lázaro Fernando, Rosa María Peraza, Sergio López, entre muchos más, no se hubiera consolidado."