Astillero
¡Pum!
La (muy) eficaz doctrina bazuca
Método rápido contra resistencias
Represión y negocios en SLP
En la Tierra Caliente de Michoacán se produjo ayer una tentadora oferta de solución a los problemas nacionales: la operación bazuca. ¡Pum! Y todo acabó. Un click salvador y la resistencia y la oposición terminan. Todo fuese como jalar un gatillo (u oprimir un botón, o dar una orden, o no darla y dejar que otros asuman el poder mientras uno navega en la nada).
El gobierno de George W. Calderón ha hablado de guerra y las escenas de ayer respaldan en posición de ataque sus palabras. Ni siquiera ha sido necesario en México, tierra de la simplicidad administrativa, firmar actas patrióticas, pues con la simple fuerza de los hechos se ha mostrado que, cuando de entrar en combate se trata, no son necesarias ni válidas las leyes y otras mitologías presuntamente protectoras de derechos o buscadoras de castigos institucionales y no de facto.
A una semana del confuso episodio de Carácuaro, los militares mexicanos dejan sentada una premisa ejemplar en Apatzingán: no son necesarios los procesos legales ni las tácticas disuasorias o extenuantes cuando es necesario acabar con un peligro. ¡Zaz!, una decisión firme y todo acaba en un santiamén. Una tanqueta y desde ella el arma lanzadora de proyectiles que zanjan todo litigio (ametralladora lanzagranadas MK 19, calibre 40, según las primeras informaciones bélicas disponibles): tierra arrasada, cenizas y polvo. La pena de muerte sin juicio. La aplicación del criterio de la superioridad en sustitución de las monsergas jurídicas. Te lo digo Apatzingán para que lo entiendas México. Hoy, por el narco; mañana, por lo que sea necesario. La abolición de las leyes no pasa por un congreso, sino por un arma al hombro.
Desde luego que el narcotráfico debe ser combatido y encarcelados, y muy castigados, sus gerentes y empleados. Desde luego que el Estado debe actuar con su fuerza -la única legítima, según los cánones académicos- y someter al imperio de la ley a quienes la infringen (¡sopas, el tecleador se está poniendo solemne y mamón!). Pero los actos de Michoacán llevan la B de Benganza como divisa, y el Estado no debe funcionar con sentido de represalia, sino de justicia, no de vendetta gremial o corporativa, y sí de respeto a leyes y derechos por muy mancillados que estuvieran (¡vaya que el escribano anda desatado con eso de la prosopopeya!). El comandante Calderón abrió la puerta a la participación abierta y creciente de los militares en asuntos que los civiles no pudieron resolver mediante la política y el andamiaje institucional ordinario, y ahora la lógica del exterminio del enemigo (que es el razonamiento militar) recorre el país, hoy en el choque con personajes siniestros y peligrosos como son los narcotraficantes, mañana (si esa lógica y esa presencia continúan) contra todo aquello que a juicio de quienes tienen las armas deba ser extirpado. ¡Pum! Rapidito.
Astillas:
El gobernador de San Luis Potosí, Marcelo de los Bisnes, pretende ganar indulgencias calderonistas ejerciendo "mano dura" contra movimientos sociales. Habiendo apostado con todo a favor de Santiago Creel, y en permanente pleito con el delfín de Felipe para la sucesión potosina (el senador Alejandro Zapata Perogordo), el Otro Marcelo ha afinado su vocación represiva y mantiene en la cárcel o persigue a quienes se le oponen. Metido en todo negocio que por su feudo pase, el mandatario local cree llegado el momento de aplicar cuanta fuerza sea necesaria para que al fin salga adelante el bisnes compartido llamado Minera San Xavier, en Cerro de San Pedro, el sitio fundacional de la ciudad capital del estado. Semanas atrás, por ejemplo, encarceló a Pedro Rebolloso, dirigente de organizaciones populares que se mantenía frente al palacio de gobierno en protesta por las actividades de la protegidísima Minera San Xavier. Luego fueron detenidos cinco estudiantes universitarios, acusados de pintar leyendas en el mencionado palacio e incluso de corromper a menores, al inducirlos a secundar las protestas de manera delictiva. Ahora amaga con detener a dirigentes del Frente Amplio Opositor. La conducta del gobernador De los Bisnes es similar a la de la mayoría de sus congéneres: llegados al poder en sustitución del priísmo al que se han emparejado en tretas de corrupción, esos personajes creen válido y natural mezclar sus negocios personales con los oficiales y aprovechar las ventajas del cargo para fortalecer sus empresas o crear nuevas, siempre en riguroso beneficio familiar o grupal. Además, tienen insensibilidad política extrema, lo que les lleva a actuar con desdén hacia los pobres (que son pobres porque quieren o, en el extremo opuesto, porque no quieren... trabajar) y a declarar guerra sin cuartel a cualquier esbozo crítico desde los medios de comunicación y a los líderes y organizaciones sociales que no se acomoden a sus santificados planes... ¡Aguas! Riverto Norbera anda muy suavecito. Según eso, ni cuenta se dio de los desnudos junto a la Catedral Metropolitana, y del aborto habla pero en tono más mesurado. Asegura el cardenal que nadie lo regañó en El Vaticano, en días pasados, por sus llamados a desobedecer las leyes y por las excomuniones de saliva que impartió su Rubencito Aguilar de nombre Hugo Valdemar... Por cierto, vale la pena asomarse al video que Edgar Rossano hizo para www.astillero.tv sobre los desnudos del Zócalo; allí están las escenas, por ejemplo, en que las mujeres, reunidas para una fotografía de género, corean el ¡Sí al aborto!... Igualmente está disponible, en la página electrónica de esta columna, un documental del Colectivo Klamvé denominado Atenco, un crimen de Estado, que es necesario ver para entender lo que ha sucedido y sucederá con el movimiento, cuyos líderes han sido sentenciados, en primera instancia, en términos desproporcionados y aberrantes (un lector recuerda que luego de ese primer nivel judicial quedan los recursos de la apelación y el amparo directo, además de los beneficios de libertad anticipada que la ley prevé)... ¡Hasta mañana, mientras esta columna se pregunta si alguien creerá posible confeccionar una "Reforma del Estado" más o menos aceptable a partir de los "consejeros" ayer nombrados!
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