Diputados y senadores demandan que se definan cabalmente sus facultades
Riesgo de que se use el cuerpo de elite para la represión: legisladores
Es inconstitucional y representa el abandono del Estado en materia de seguridad: ONG
Los coordinadores de las bancadas de los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD) en la Cámara de Senadores consideraron importante la creación de un grupo de elite del Ejército para combatir el crimen organizado, de manera especial el narcotráfico, pero advirtieron que deben definirse bien sus facultades para que no se caiga en la tentación de usarlo para reprimir movimientos sociales, disidentes políticos o cometer excesos.
En la Cámara de Diputados, el PRD cuestionó el decreto por el que el Ejecutivo creó el nuevo cuerpo militar, y advirtió que constituye un peligro que el Ejército participe en tareas de carácter policiaco y preventivo. El coordinador del PRD en el Palacio Legislativo de San Lázaro, Javier González Garza, resaltó que el nuevo cuerpo militar de elite "nos parece una desmesura peligrosísima, porque con el Ejército no se puede jugar".
En tanto, el coordinador de los senadores del PRD, Carlos Navarrete, dijo que exigirá que se revisen las funciones y atribuciones de ese organismo, ya que preocupa que pueda actuar en "situaciones críticas de perturbación de la paz social, tal como se expresa en el decreto por el que se crea ese grupo militar".
"Quien perturba la paz social del país es el crimen organizado, y pretender equipararlo con una manifestación pública o un conflicto social sería una barbaridad, por eso hay que focalizar este cuerpo de elite, sus facultades, mandos y objetivo fundamental", recalcó Navarrete.
Asimismo, el coordinador de los senadores panistas, Santiago Creel, dijo que en ninguna forma alguna podrá utilizarse ese grupo para reprimir movimientos sociales. Destacó que el combate a la inseguridad y la violencia desatada en el país mejorará con la actuación de este nuevo cuerpo militar, lo que además permitirá el eventual regreso de los integrantes de las fuerzas armadas a sus cuarteles.
El coordinador de los senadores priístas y presidente de la Cámara de Senadores, Manlio Fabio Beltrones, dijo que debe ponerse fecha al retiro del Ejército de las calles, y vigilar de manera especial a este nuevo grupo de elite, toda vez que los organismos de este tipo, si no tienen supervisión y control, "terminan por contaminarse y cometer excesos".
La fracción del PRI, recalcó Beltrones, pondrá atención especial a que esto no suceda, y confía en que el Ejército deje de participar en tareas policiacas.
Por otra parte, el PRD cuestionó en la Cámara de Diputados el decreto por el que el presidente Felipe Calderón constituyó el cuerpo de militar de elite, no sólo porque asume funciones de la Policía Federal Preventiva (PFP), sino porque constituye un peligro que el Ejército participe en tareas de carácter policiaco y preventivo.
Javier González Garza resaltó el hecho de que este cuerpo especial sólo recibirá órdenes del Ejecutivo. "El señor Calderón lo que quiere es un Ejército de elite para ordenarles nada más él. Nos parece una desmesura peligrosísima, porque con el Ejército no se puede jugar".
Dijo que, a partir de lo publicado en el decreto, el gobierno federal podrá ocupar este cuerpo especial contra las protestas sociales, "y entonces debemos tener mucho cuidado; en nuestra opinión, la conformación de este grupo es anticonstitucional e invade las atribuciones que son exclusivas de la PFP en la preservación de las libertades, el orden y la paz pública".
Seguridad, tarea de civiles
El secretario ejecutivo de la Red Nacional de Organismos de Derechos Humanos Todos los Derechos para Todos, Edgar Cortez, aseveró que la creación del nuevo cuerpo militar de elite por parte del presidente Calderón "va contra la Constitución y significa el abandono total de la responsabilidad del gobierno en materia de seguridad pública, que debe ser una tarea realizada por civiles. Es una perversión de un Estado democrático, y se debe hacerle un cuestionamiento serio al Presidente por esa decisión".
Cortez destacó que es un enorme riesgo otorgarle más facultades discrecionales y mayores oportunidades al Ejército para participar en cualquier cosa; "es un enorme riesgo abrirle tanto las posibilidades a los militares, sin mecanismos de control y vigilancia, además de que es una tarea que no corresponde al Ejército".
El secretario ejecutivo de la Red Todos los Derechos para Todos manifestó que de haber entrado como organismo de apoyo a tareas de seguridad, ahora resulta que el Ejército es la institución fundamental en esas actividades, y "eso me parece un enorme riesgo, sobre todo porque en el decreto por el que se crea se indica que 'estarán capacitados -el cuerpo de elite- en el manejo de situaciones críticas de perturbación o alteración de la paz social y seguridad pública' para restablecer el orden y el estado de derecho".
Esta decisión de Calderón, aseveró Cortez, va en contra de lo que han manifestado instancias internacionales, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la Organización de las Naciones Unidas (ONU), las cuales no de ahora, sino por lo menos desde hace una década, han advertido de los riesgos que implica dejar en manos de militares las tareas de seguridad".