Fracasa tregua pactada el domingo; tres muertos
Dimite ministro palestino del Interior por falta de apoyo de Fatah y Hamas
Ampliar la imagen Un menor palestino salta la barricada de militantes de Hamas, destruida por partidarios de la facción rival Fatah, ayer en la ciudad de Gaza Foto: Ap
Gaza, 14 de mayo. El ministro palestino del Interior, Hani Al Qawasmeh, renunció hoy a su cargo en medio del más grave resurgimiento de la violencia desde la entrada en funciones del nuevo gobierno de unidad, hace dos meses, y que desde el viernes dejó ocho muertos y 50 heridos en la franja de Gaza.
Después de quejarse de no ser apoyado por los líderes de Hamas y ni de Fatah, el movimiento del presidente Mahmoud Abbas, afirmó que renunció porque no quería desempeñar "una función meramente decorativa", y recalcó que "no puedo aceptar ser un ministro sin autoridad".
El primer ministro, Ismail Haniyeh, aceptó la dimisión de Qawasmi, y se hará cargo del ministerio del Interior de forma interina.
Tras la dimisión de Qawasmi, Hamas y Fatah renovaron un compromiso para aplicar la tregua lograda anoche con la mediación de Egipto, que debía haber entrado en vigor a primera hora de este lunes, y acordaron poner fin a los enfrentamientos y retirar a todos los hombres armados de las calles.
Pese a la tregua pactada, los enfrentamientos continuaron hoy, y en Gaza murieron tres palestinos, dos de ellos miembros de Fatah, y otro más en Jan Yunes. The Independent aseguró que dos de los fallecidos eran periodistas locales.
Los cancilleres de la Unión Europea, que se reunieron en Bruselas con sus homólogos de la Liga Arabe a fin de analizar la situación en Medio Oriente, dieron su apoyo a la iniciativa de paz para la región que impulsan los países árabes.
En tanto, el rey Abdallah II de Jordania pidió al vicepresidente de Estados Unidos, Dick Cheney, su contribución para impulsar el proceso pacificador en Medio Oriente, al concluir una gira por la región.
Jerusalén, 40 años ocupada
Israel inició las celebraciones del 40 aniversario de la "reunificación de Jerusalén", que comenzó con una sesión especial del Parlamento, pero que fue boicoteada por los embajadores de Estados Unidos y la Unión Europea con el argumento de que el estatus de la ciudad debe determinarse dentro de una solución permanente del conflicto israelo-palestino.
Israel conquistó y se anexó el sector oriental árabe de Jerusalén durante la guerra de los Seis Días, en junio de 1967, y en 1980 proclamó la ciudad completa como su "capital eterna e indivisible", lo que no ha sido avalado por Naciones Unidas.