En un mes y medio empezaría la construcción del centro social y deportivo

Planean construir una playa artificial en el predio La Ford

Ya se hizo el planteamiento ante la Seduvi, señalan autoridades de Iztapalapa

JOSEFINA QUINTERO M.

En el predio conocido como La Ford, expropiado en marzo pasado apor las autoridades capitalinas al comprobarse que ahí se vendían autopartes robadas, el Gobierno del Distrito Federal y las autoridades de la delegación Iztapalapa tienen proyectado la construcción de una playa artificial para los habitantes de dicha jurisdicción.

Las autoridades de la delegación Iztapalapa informaron que tuvieron pláticas con la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi) para la construcción del centro social y recreativo, en cuya reunión se planteó la playa artificial. Entre los trabajos que ya se realiza está la búsqueda de material para hacer que la arena sea más higiénica y de calidad para evitar contagios.

En un mes y medio empezaría la construcción del centro social y deportivo, a la cual se tiene considerado destinar una de entre 70 y 90 millones de pesos. Se informó que si los trabajos se inician como se ha planeado, la playa artificial estará lista entre diciembre o enero, porque es un derecho para todos los habitantes de Iztapalapa, señalaron.

El estanque que conformará la playa artificial será semiolímpico y se integrará a los espacios públicos de la jurisdicción, porque la delegación sólo cuenta con dos albercas para los habitantes, a diferencia de Benito Juárez y Venustiano Carranza, donde hay en una siete y en la otra nueve albercas.

Cuestionados por la escasez de agua potable que reporta la delegación, las autoridades informaron que se trata de calidad de vida, darles una forma de entretenimiento que también aleja a los jóvenes de la delincuencia.

Con la creación de esta nueva playa, sería la séptima en el Distrito Federal, porque ya hay en las delegaciones de Tlalpan, Iztacalco, Azcaptozalco, Gustavo A. Madero, Magdalena Contreras y Tlahuác.

Pese a los cuestionamientos por el proyecto del gobierno de la capital, las playas artificiales de la ciudad de México han sido rebasadas ante la demanda de los capitalinos, especialmente aquellas donde los índices de pobreza y marginación son altos. Un ejemplo: la playa Balneario Popular Bosque de Aragón, en Gustavo A. Madero, un día después de la inauguración la gente dio portazo.

El lugar estuvo al tope porque el límite de su capacidad, de 3 mil 500 a 4 mil personas, fue rebasado y en las filas se alcanzaba a contar, según los registros hasta 400 y 600 personas en espera de ingresar.

Otra de las playas fue Villa Olímpica, la primera en inaugurarse, localizada en la delegación de Tlalpan, pese a que ésta fue centro de críticas y recibió incluso la inspección de diputados de la Asamblea Legislativa, los bañistas han disfrutado de su instalación.

En otra de las playas, en el Deportivo Reynosa de Azcaptozalco, los instructores de natación aseguraron que los primero días de operación se rompió el récord de asistencia, con unas 5 mil personas que en un solo día visitaron el lugar.

La historia se repite en las demás playas artificiales, que fueron creadas incluso después de los periodos vacaciones, pero donde se han registrado una alta demanda. Ahora el nuevo proyecto será en Iztapalapa, en el terreno que albergaba locales de venta ilegal de autopartes y será la séptima playa artificial de la ciudad de México.