Socios del TLCAN pierden competitividad: Amcham

Ridículo, trabar el intercambio comercial en la frontera norte

Exigir que senadores estadunidenses eliminen limitaciones a transportistas mexicanos, piden empresarios de ese país

MIRIAM POSADA GARCIA

El Congreso de Estados Unidos no debe limitar el número de tractocamiones mexicanos que podrán entrar a su territorio, ni ampliar el tiempo de evaluación del programa de transporte transfronterizo, porque eso ''es ridículo'', limita el comercio y hace menos competitivos a los socios del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) frente a los gigantes asiáticos, advirtió el director de la Cámara Americana de Comercio (Amcham), Larry Rubín.

El representante de las empresas estadunidenses establecidas en México aseguró que el secretario de Economía, Eduardo Sojo, y su similar de Comunicaciones, Luis Téllez, deben exigir a los senadores estadunidenses eliminar estas trabas y avanzar en la competitividad fronteriza.

La propuesta de los legisladores estadunidenses que echó abajo el programa de transporte transfronterizo anunciado con grandes expectativas en México, consiste en limitar la entrada para sólo mil tractocamiones mexicanos, que estarían sujetos a supervisión durante tres años. El proyecto original no tenía límite de vehículos pero deberían ser los verdaderamente competitivos de cien empresas, y la prueba sería de un año.

El caso está en el Congreso y deberá resultar algo muy parecido al programa piloto de transporte transfronterizo para que el presidente George Bush lo apruebe, aseguró Larry Rubin. Añadió que cualquier cambio produce incertidumbre, aunque entre sus afiliados hay certeza de que se solucionará este conflicto, porque es indispensable que los transportistas mexicanos y estadunidenses puedan cruzar la frontera, entregar los productos con oportunidad y eficiencia, porque China avanza en acortar sus tiempos y mejorar su logística.

Consideró que la limitación a mil tractocamiones ''es ridículamente baja, porque se tienen que considerar lo que requiere el comercio, así que la necesidad de transporte puede ser dos, tres, diez veces más, debe haber sensibilidad hacia la agilidad del comercio y para que la frontera sea más productiva y competitiva, pues el comercio no para''.

Asimismo, opinó que tres años como tiempo de prueba ''tampoco es lógico, el programa tiene que ser permanente para que sea efectivo para ambas naciones; no se puede establecer un plazo de prueba, entiendo las ramificaciones políticas de dar un plazo para ver cómo funciona, pero esto funciona como el TLCAN, que tiene un tiempo límite y estamos a punto de alcanzarlo, pero como un asunto político'', porque el comercio y la integración siguen.

Aseguró que cuando Eduardo Sojo y Luis Téllez acudan al Senado estadunidense deberán enfocarse en eliminar estas dos restricciones, pero también deberán actuar en México para que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) reforme el reglamento de servicios de paquetería, que no se ha tocado desde hace 10 años, para que las mercancías también se muevan por este conducto.