No ve peligro en la izquierdización o derechización de los gobiernos regionales
Faltan políticas integrales de desarrollo claras en América Latina, destaca Slim en Chile
Ampliar la imagen Carlos Slim en la conferencia sobre el agua organizada en marzo de 2006 Foto: Marco Peláez
Santiago, 20 de mayo. El magnate mexicano Carlos Slim no ve peligro en una izquierdización o derechización de la región, pero destaca que faltan políticas integrales de desarrollo claras, dijo en una entrevista difundida el domingo por un diario chileno.
Slim, quien participó esta semana en un seminario privado en Santiago, dijo al diario La Tercera que América Latina tiene el gran desafío de ''incorporar a la gente que está marginada a la modernidad, a la economía, al mercado de trabajo y de bienes y servicios''.
El empresario mexicano cree que un modelo interesante para observar es lo que está ocurriendo en Asia, más allá de las corrientes políticas que imperan en la región.
''(No veo) peligro en la izquierdización o derechización de América Latina'', dijo. Pero ''la veo un poco dispar. No está teniendo la visión que posee China o los países del sudeste asiático'', comentó Slim, quien mantiene contactos con varios gobiernos del continente.
El influyente empresario es propietario de la mayor telefónica celular de Latinoamérica, América Móvil, y además tiene bancos, firmas de construcción y empresas minoristas. Enfatizó que se deben perfeccionar las políticas aplicadas en la región, ya que algunos países ''pueden tener regresiones y otros (en cambio) crecer más rápido''.
Sin calificar directamente lo que, por ejemplo, realiza el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, en materia de nacionalización de empresas, Slim enfatiza que se deben ''tener claros los paradigmas de esta nueva civilización. Así como antes en las sociedades agrícolas se necesitaba un poder monolítico y se reunía la política, la región, el poder económico y militar en el emperador, hoy no. Es un mundo democrático, plural, diverso, de libertad, de creatividad, de competencia'', destacó.
''Lo esencial no es si es de izquierda, de centro o de tres cuartos, sino que entienda el mundo (...) por ejemplo, China, no se puede hablar de un país que sea de izquierda o derecha''.