Sufren pobladores la insuficiencia de vialidades
Santa Fe es víctima de un desarrollo descontrolado
Ampliar la imagen Circulación a vuelta de rueda en la avenida Vasco de Quiroga Foto: Carlos Cisneros
A poco más de dos décadas de haber iniciado su construcción y con 60 por ciento de desarrollo, el exclusivo complejo Santa Fe, en el que se estima que existe una población flotante de 83 mil 500 personas diarias, ha afectado severamente el entorno urbano, lo que se refleja en la insuficiencia de las vialidades, la pérdida de áreas verdes y los daños al medio ambiente por descargas sanitarias excesivas, que han convertido el río del lugar en un gran drenaje a cielo abierto.
De acuerdo con un estudio realizado por las autoridades de la delegación Alvaro Obregón y el Instituto Politécnico Nacional (IPN), en los últimos dos años el flujo vehicular ha aumentado 20 por ciento, lo que provoca, por ejemplo, que en una de las arterias que dan al conglomerado de negocios, la avenida Vasco de Quiroga, existan tramos en los que se circula a cinco kilómetros por hora.
Esta situación, que deriva de la presencia de 75 edificios de oficinas, cuatro centros comerciales, cuatro mil departamentos, mil 500 casas habitación, cinco hoteles, siete universidades y escuelas, entre otras edificaciones que integran el complejo construido en una superficie de tres mil 500 metros cuadrados, ha prendido la alerta entre los pobladores de las áreas aledañas.
De hecho, ayer en conferencia de prensa, en la que estuvo presente el jefe delegacional de Alvaro Obregón, Leonel Luna Estrada, representantes de 26 colonias dieron a conocer la constitución del Frente de Residentes del Corredor Santa Fe y solicitaron el apoyo para frenar el desarrollo inmobiliario descontrolado y la integración de un fideicomiso con recursos de la iniciativa privada para resarcir los daños ocasionados.
Los vecinos, que dijeron sentirse "desterrados en su propia tierra", hicieron énfasis también en la necesidad de recuperar la avenida Vasco de Quiroga, que los lunes, viernes y sábados, prácticamente se ve bloqueada en una distancia de entre 250 y 450 metros lineales, por la presencia de tianguis, que provocan tapones viales en los que se pierden por los menos dos horas.
En el acto, Luna Estrada, quien reconoció que esta situación puede tornarse aún más difícil, pues restan por construir 30 inmuebles más en el complejo Santa Fe, se comprometió a iniciar los contactos pertinentes con cada una de las empresas para integrar el fideicomiso en el que se aporten los recursos para mitigar el impacto negativo en la zona, hacer una revisión de las construcciones en curso y realizar una cruzada para reubicar los tianguis.
Detalló que para resolver el problema de la vialidad en el caso de Vasco de Quiroga, que comienza en el pueblo de Santa Fe y concluye en la Unidad Belem, es necesario construir puentes peatonales, retirar algunos topes, reubicar semáforos, e inclusive, dijo, se analiza la pertinencia de hacerla de un solo carril de subida en la mañana y de bajada durante la noche.