Deben pagar cuotas al instituto, dice Ramírez López
Exige la CNC a agroempesarios afiliar a labriegos al IMSS
La Confederación Nacional Campesina (CNC) y el presidente de la Comisión de Desarrollo Rural del Senado, Heladio Ramírez López, demandaron a los agroempresarios que afilien al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) a los millones de jornaleros agrícolas y que paguen sus cuotas a la institución. No pueden argumentar falta de recursos, ya que el año pasado, por exportaciones, obtuvieron ganancias por 13 mil 922 millones de dólares.
"No es posible que en este nuevo milenio los jornaleros vivan como en la época medieval, pues aparte de recibir salarios miserables carecen del derecho a la salud y a la jubilación; por ejemplo, sólo porque los agropatrones violan la ley al no incorporarlos al IMSS", expresó Cruz López Aguilar, presidente de la CNC.
El dirigente de la confederación manifestó su beneplácito por la determinación del titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Javier Lozano Alarcón, de negarse a que los empresarios del campo estén exentos del pago de cuotas al IMSS, mediante un decreto que vence el próximo 23 de julio, el cual fue publicado durante la administración del ex presidente Vicente Fox, "prominente agroindustrial que protegió a sus homólogos mediante un decreto".
Ramírez López comentó que de los 5 millones de campesinos pobres que viven como jornaleros agrícolas en las prósperas plantaciones del país, alrededor de 3 millones 400 mil son niños indígenas, quienes al igual que sus padres padecen la violación de sus derechos humanos.
"Para esos humildes trabajadores del jornalerismo rural no hay una sola mención en el flamante Plan Nacional de Desarrollo, y a esta intolerable omisión se suma la ausencia de una política de Estado que responda no sólo a las angustiosas realidades presentes, sino a la expectativa de una clase campesina al borde mismo de la tolerancia en las instituciones del país", agregó.
Indicó que la afiliación de jornaleros al régimen obligatorio de seguridad social descendió 90 por ciento a partir de diciembre de 2000, pues datos oficiales revelan que la cifra bajó de un millón 112 mil 892 a sólo 147 mil.
Ramírez López reconoció la existencia de patrones "sensibles", pero dejó en claro que son más los que no cumplen las obligaciones que señalan las leyes y evaden su responsabilidad. "Lo que más indigna y subleva es el trato a los niños jornaleros en un país cuya Constitución prohíbe el trabajo infantil en el inciso tercero del artículo 123. Además, pese a los programas alimentario y de salud, investigaciones recientes confirman porcentajes de desnutrición de 84.6 por ciento en el caso de niños y niñas migrantes temporales, y de 76.9 por ciento en la población infantil asentada en los campos agrícolas."
El legislador demandó revisar y actualizar el capítulo tercero de la Ley Federal del Trabajo, lo mismo que la Ley de IMSS en lo que concierne a los trabajadores campesinos, sin olvidar el reglamento de la seguridad social para el campo, cuya evaluación debe hacerse junto con los patrones y el gobierno federal.