Subraya que debe prevalecer el diálogo en la región
El presidente vasco ratifica su apoyo a la lucha contra ETA
Ampliar la imagen José Luis Rodríguez Zapatero, jefe del gobierno español, recibió ayer en el Palacio de la Moncloa al presidente del gobierno vasco, Juan José Ibarretxe Foto: Reuters
Madrid, 20 de junio. El presidente del gobierno vasco, Juan José Ibarretxe, ofreció hoy su total respaldo al jefe del Ejecutivo español, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, en la lucha contra la organización armada vasca ETA, así como en su política de diálogo para acabar con la violencia en la región.
Rodríguez Zapatero recibió hoy a Ibarretxe en el Palacio de la Moncloa, en el contexto de los encuentros institucionales del mandatario español tras la ruptura de la tregua unilateral de ETA, efectiva desde el pasado 6 de junio.
Ibarretxe, del moderado Partido Nacionalista Vasco (PNV), aseguró que a pesar de las diferencias políticas, Rodríguez Zapatero puede contar con su apoyo en la lucha antiterrorista. "Ahora más que nunca necesitamos la política para combatir la violencia y lograr acuerdos políticos", dijo.
Pero afirmó que no respaldará fórmulas del pasado, concretamente de la época del Partido Popular (PP), el principal partido opositor de España, para luchar contra el grupo armado separatista.
Si bien el lehendakari (término con el que se conoce al presidente del gobierno vasco) insistió en que su apoyo al gobierno español es "sin matices", subrayó que en la "lucha contra la violencia no vale todo", y expresó su desacuerdo con la política de exclusión, la aplicación de la Ley de Partidos, creada por el anterior gobierno del conservador José María Aznar para ilegalizar a la coalición vasca Batasuna, así como con la política penitenciaria de los presos etarras, pues "no van acorde con los derechos humanos y nos alejan de la paz y la normalización política" en el País Vasco.
Aseguró que defiende "los derechos fundamentales de todas las personas, incluidos los de las que han cometido horribles delitos y en las políticas de solidaridad, cariño y reconocimiento a las víctimas".
Por otro lado, Ibarretxe manifestó que el esfuerzo del diálogo de paz no acabó bien, pues la ruptura de la tregua de ETA fue "un final perverso", aunque consideró que era necesario intentarlo. "Fue un intento honesto que mereció la pena a pesar de los errores y aciertos. En política hay que arriesgar una y mil veces por conseguir la paz", comentó.
En tanto, a casi un mes de las elecciones municipales y autonómicas, Navarra sigue pendiente de los pactos entre las fuerzas regionales para la formación de gobierno.
No obstante, hay señales para la formación de un gobierno integrado por Unión del Pueblo Navarra (marca electoral del PP en la región) y el Partido Socialista de Navarra, en detrimento del nacionalista moderado Nafarroa Bai.