Gravar la gasolina disparará los precios de los productos básicos, advierte
La reforma fiscal es un atentado contra los pobres y la clase media: AMLO
Sostiene que hay un pacto para proteger a los mandatarios de Oaxaca y Puebla
Veracruz, Ver., 21 de junio. La reforma fiscal que Felipe Calderón Hinojosa envió al Congreso de la Unión es un aumento disfrazado de impuestos que atenta contra los pobres y la clase media del país, la cual "será exprimida como un limón", afirmó el ex candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador.
Acusó que al imponer un gravamen a la gasolina se dispararán en cadena los aumentos en los precios de los productos básicos, lo que será un golpe mortal a los más desprotegidos.
Al iniciar una gira por Veracruz, donde recorrerá 26 municipios de la zona centro y la sierra de Zongolica, el ex jefe de Gobierno del Distrito Federal repudió la propuesta de reforma hacendaria que el miércoles pasado presentó el Ejecutivo al Poder Legislativo.
Llamó a los diputados y senadores del Frente Amplio Progresista, integrado por los partido de la Revolución Democrática (PRD), del Trabajo (PT) y Convergencia, a mostrar la misma postura y dignidad como lo hicieron en la reforma a la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) y evitar que siquiera se programe un periodo extraordinario para discutir la iniciativa del "mequetrefe Calderón".
En contraparte, señaló, la propuesta del gobierno federal "trata muy bien a los banqueros, que son los hijos predilectos del régimen. Todo lo que es el mundo financiero está exento del pago de impuestos".
Aseveró que si en verdad se busca obtener más recursos para el erario federal, la clave está en eliminar los privilegios fiscales de los grandes empresarios y reducir el costo del gobierno en todos sus niveles, como sueldos del organigrama presidencial, manutenciones de lujo a funcionarios y gastos excesivos para los privilegiados del panismo, a cargo del bolsillo de los mexicanos.
"Calderón gana 160 mil pesos, dos veces más que el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, y tres veces más que la presidenta chilena, Michelle Bachelet; le mintió al pueblo cuando dijo que se bajaría el sueldo, mientras que el secretario de Hacienda, Agustín Carstens, tiene una asignación diaria de 3 mil pesos para alimentación: entonces es un descarado al querer imponer más impuestos".
El político tabasqueño también llamó a eliminar pensiones de los ex presidentes, "al flojo de Vicente Fox y al perverso de Carlos Salinas que no se merecen ser mantenidos por el pueblo al que perjudicaron".
López Obrador calificó como "una faramalla, una simulación y pantomima", las investigaciones que la Suprema Corte de Justicia de la Nación anunció contra los gobernadores de Puebla y Oaxaca, Mario Marín y Ulises Ruiz, respectivamente, por las violaciones a las garantías constitucionales de la periodista Lydia Cacho y a los integrantes de la APPO en el conflicto magisterial.
Estos procesos, expuso, son acuerdos entre las cúpulas priístas y panistas para presionar y llegar a pactos para beneficiarse mutualmente, y uno de ellos sería la aprobación de la reforma fiscal.
"Ni al gobernador de Puebla ni al de Oaxaca les van a hacer nada, de una vez se los adelanto: hay un acuerdo entre las cúpulas priístas y panistas, ya están completamente amarrados".
Recordó que en la campaña presidencial, Felipe Calderón despotricó contra Mario Marín, gobernador de Puebla "y a la semana (los priístas) tuvieron un acuerdo con él y le fijaron una cuota de 300 mil votos para Acción Nacional, además de una cuota de dinero: hubo un acuerdo, al igual que pasó en Oaxaca".