Exigen a la CFE frenar daño ambiental en Salamanca
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Según el Instituto de Ecología de Guanajuato, la mayor cantidad de metales pesados en el aire que respiran los salmantinos proviene de la Comisión Federal de Electricidad. En la imagen, niños que deben usar cubrebocas por los contaminantes
Foto: Martín Diego Rodríguez
Salamanca, Gto., 21 de junio. El presidente de la Comisión de Ecología del Congreso de Guanajuato, Luis Alberto Camarena Rougón, emitió un exhorto a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para que atienda las emanaciones que hace en Salamanca. "Que no le hagan al tonto, saben que están contaminando y no pueden salir con excusas pues se está dañando a la ciudadanía", acusó.
Declaró lo anterior luego que según el Instituto de Ecología del Estado, y tras un análisis de la calidad del aire de la localidad, se encontraron cenizas que contienen metales pesados como vanadio, arsénico, magnesio, níquel y plomo, que aparentemente son originadas por la CFE; sin embargo, en la ciudad existen al menos 30 empresas químicas y se ubican cerca de 120 mil toneladas de pasivos ambientales al aire libre.
Camarena Rougón, también integrante de la Comisión Especial para el Seguimiento de la Contaminación en Salamanca, del Congreso local, expresó que "hace falta ver si el vanadio ha contaminado el agua; eso es más peligroso, si se llega a comprobar va a ser un problema de salud enorme".
Ante la presencia de metales pesados en el aire de Salamanca, la Comisión Permanente del Legislativo estatal solicitó la comparecencia del secretario de Salud en la entidad, Armando Aguirre Torres, para que informe la condición de salud de los salmantinos.
"Nuestro secretario de Salud dice que en Salamanca no hay un índice de enfermedades mayores que en el estado; eso es una estupidez porque la exposición a los agentes contaminantes ha provocado una cifra negra de padecimientos que las autoridades deben reconocer", sostuvo.
La tarde del martes los integrantes de la comisión especial se reunieron con funcionarios de la CFE, Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Secretaría de Energía y Procuraduría Federal de Protección al Ambiente con la finalidad de "realizar las tareas necesarias y remediar la situación de contaminación en Salamanca, aunque lo hemos gritado, pataleado y fue tema de campaña del presidente Felipe Calderón, y a la fecha no se ha visto nada", concluyó el legislador Luis Alberto Camarena Rougón.
"Vivir en Salamanca es el infierno, todo el tiempo está la chimenea (de la refinería de Pemex) con el fuego a todo lo que da, todos los días huele a azufre y todos los días nos levantamos y vemos al mismito diablo", dice Regina Martínez, señalando a la CFE y a la refinería.
Ella es una de los 160 mil 331 habitantes de Salamanca, inhala a diario las emanaciones de las compañías paraestatales, asegura que sus hijos han presentado cuadros de dolor de cabeza, náusea y vómito; incluso, llevan más de un mes sin salir a la calle, "no vaya a ser que se enfermen peor y luego ¿qué hacemos?"