Rechaza el director las ''intromisiones'' de Elena Cepeda, secretaria de Cultura del DF
Enrique Barrios condiciona su permanencia al frente de la OFCM
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El director de orquesta Enrique Barrios, con la pianista Eva Zuk, durante un ensayo de la Filarmónica de la Ciudad de México
Foto: Cristina Rodríguez
El director Enrique Barrios tronó ayer contra la secretaria de Cultura del DF, Elena Cepeda, y condicionó su permanencia en la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México (OFCM) a un ''cambio drástico en la manera de proceder" de la funcionaria.
En exclusiva para La Jornada, el músico explicó que su determinación -la cual podría ser tomada como una renuncia por adelantado- se debe a ''las intromisiones que (Cepeda) ha tenido en los procesos internos de la orquesta".
La funcionaria, dijo, no respetó y desconoció el acuerdo al que llegaron el pasado mayo el director artístico y los integrantes de la orquesta para ocupar 14 vacantes de atrilistas.
''Era un proceso atorado desde hace cuatro años por problemas internos y por primera vez llegamos a un acuerdo que aprobó el pleno de la orquesta para realizar las convocatorias y las las audiciones", indicó el músico.
''La secretaria de Cultura descartó nuestro acuerdo y sin tener conocimiento de lo que implica este proceso, cambió todo, pues dijo que las convocatorias no serían como las definimos y que ella haría las cosas como mejor le pareciera."
Barrios precisó que incluso se había consultado con la Comisión Nacional de los Derechos Humanos el aspecto de las convocatorias, ''para que no fueran discriminatorias", ya que en principio las plazas estarían abiertas exclusivamente para músicos mexicanos.
''La ley dispone que primero debe buscarse si los músicos de procedencia nacional pueden hacer el trabajo y, si no, debe buscarse artistas de otra nacionalidad".
Respecto de eso marcaría un rompimiento definitivo con la Secretaría de Cultura, el director de orquesta respondió:
''Es importante que las nuevas autoridades culturales se ubiquen en sus atribuciciones, qué sí pueden hacer y qué no. Una sinfónica de la calidad de la Filarmónica de la Ciudad de México no puede estar en manos de gente que no conoce.
''Sí es importante que si las cosas no se hacen bien prefiero no hacerlas. O hay respeto en la Secretaría de cultura o no vale la pena estar. Ya hablé con la secretaria; es una persona que no escucha".
En espera de que el conflicto se resuelva de manera favorable para las partes, el músico menciona que éste no es el primer desencuentro que tiene con la funcionaria.