Por sus efectos sistémicos ayuda en 90% de las enfermedades: expertos cubanos
La ozonoterapia acelera efectividad de tratamientos y mejora calidad de vida
Posee propiedades antinfecciosas y estimulantes del metabolismo de los glóbulos rojos, entre otras
Ampliar la imagen Irina Wilkins aplica ozonoterapia muscular Foto: María Luisa Severiano
El uso del ozono para mejorar la calidad de vida del ser humano está más que probado. Cuando este gas, de color azul y olor peculiar, penetra al cuerpo, se potencia la acción del oxígeno en los tejidos, lo que favorece el metabolismo de las células a todos los niveles. Dependiendo del tipo de padecimiento, se administra vía intramuscular, interarticular, rectal, atmosférica o sanguínea.
En Cuba, uno de los países con más investigación en este campo, se aplica para atacar un sinnúmero de enfermedades o trastornos, como el sueño, la ansiedad, la gastritis, la artrosis, artritis reumatoidea, las cerebro-vasculares y degenerativas del sistema nervioso, la parálisis cerebral infantil, la esclerosis lateral amiotrófica, demencia senil, osteoporosis, hernia discal, el asma bronquial, las insuficiencias venosas y arteriales, las lesiones ostiomiarticulares, los síndromes de mala absorción intestinal y los problemas inmunológicos, entre otros.
Acción fotoquímica
Este gas se forma de manera natural por la acción fotoquímica en la atmósfera terrestre, en la que es elemento vital como filtro de los rayos solares. Sin embargo, para fines terapéuticos se puede fabricar con técnicas modernas. Introducido al organismo en pequeñas cantidades mejora la calidad de vida de las personas debido a sus propiedades moduladoras del sistema inmune, antinfecciosas, estimulantes del metabolismo de los glóbulos rojos y del oxígeno, así como reguladoras del llamado estrés oxidativo, este último asociado a unas 250 enfermedades o trastornos.
En entrevista con La Jornada, los especialistas cubanos Irina Wilkins Pérez y José Luis Colunga Fernández aseguraron que el campo de las aplicaciones médicas del ozono es tan amplio como las oportunidades de elevar la calidad de vida del individuo. Si bien no sustituye ningún tratamiento, mejora y acelera su efectividad, en 90 por ciento de las enfermedades por sus efectos sistémicos.
El doctor Colunga Fernández, quien trabaja en el Centro de Investigación del Ozono (CIO) en Cuba, explicó que este gas -que se absorbe y distribuye rápidamente en el torrente sanguíneo- se utiliza desde hace varios años en países como Alemania, España, Italia, Japón, Estados Unidos, Rusia y Cuba, que hoy goza de prestigio mundial por sus aportes al desarrollo de tratamientos con enfoques clínico-investigativos que demuestran la eficacia y la ausencia de daños de este gas.
Su alto poder germicida fue descubierto en Alemania durante la Primera Guerra Mundial, cuando se utilizó para limpiar y desinfectar heridas, eliminar gérmenes, bacterias, virus, hongos y algunos helmintos. En la ortopedia y la reumatología, por ejemplo, tiene gran auge, sobre todo en países como Cuba, España e Italia, donde es usado para aliviar los efectos de la artrosis, la artritis reumatoidea, la inflamación de las articulaciones del hombro y la fibriomialgia o enfermedad en la vaina de los tendones.
La doctora Wilkins, quien representa en México tanto al CIO como al CREN (Centro de Restauración Neurológica), subrayó que la ozonoterapia alivia el malestar que provoca este tipo de dolencias, disminuye la inflamación, retrasa el proceso de deformación, eleva la capacidad articular y reduce el consumo de medicamentos, principalmente antinflamatorios e inmunosupresores, que generan muchas reacciones tóxicas a corto y largo plazos. A su juicio, la importancia del ozono en el tratamiento de la artrosis radica en sus características antioxidantes y su capacidad de eliminar los radicales libres, sustancias nocivas que atacan las biomoléculas del organismo y que están presentes en 90 por ciento de las enfermedades y, por tanto, en las articulaciones inflamadas.
Para el doctor Colunga, la ozonoterapia es clave para estimular indirectamente la función del riñón, que consume casi 20 por ciento de la sangre del organismo. Al elevar el flujo sanguíneo, enfatizó, este órgano excreta más ácido úrico y disminuye la cantidad del mismo en la sangre, con lo cual se evita o reduce la artritis gotosa que se produce cuando se forman cristales de ácido úrico.
Además, dijo la doctora Wilkins, el ozono es muy útil en padecimientos cerebro vasculares isquémicos, esclerosis lateral amiotróficos, demencia senil, esclerosis múltiple y hasta el mal de Parkinson.
Importante en pacientes geriátricos
La ozonoterapia también está considerada como una herramienta terapéutica importante en el caso de los pacientes ancianos, con neumonía, asma bronquial, diabetes mellitus y sus manifestaciones.
Según las estadísticas, es excelente terapia para el control del colesterol, el glaucoma, la retinosis pigmentaria, las atrofias el nervio óptico y la insuficiencia renal. El ozono (proviene de la palabra griega ozein, que significa oloroso) es también altamente eficaz para purificar aguas para consumo humano o de desecho de la industria biotecnológica y biofarmacéutica.
En 1985 se creó en Cuba el Centro de Investigaciones del Ozono, que ha desarrollado estudios y tecnologías para la aplicación del gas, como son los equipos generadores del gas incoloro (Ozomed). En México se puede encontrar el Ozomed en el consultorio de la doctora Wilkins, ubicado en Luz Aviñón 13-202, colonia Del Valle. Teléfonos: 5682- 9100 o 5682-7872.